La unidad de misiles del Ejército yemení ha apuntado contra una base aérea de Arabia Saudí en su propio territorio, en la región fronteriza de Najran.
De acuerdo con la cadena de televisión yemení Al-Masira, las fuerzas yemeníes han lanzado exitosamente un misil balístico tipo Zelzal-3 contra la concentración de los soldados saudíes en la base militar de Asnad en la parte oriental de Seqam en Najran.
Fuentes fidedignas informan también del ataque de la unidad de artillería del Ejército yemení, apoyado por el movimiento popular Ansarolá, a las posiciones militares saudíes en Al-Shabaka y Al-Abadia, en la región de Jizan (sur de Arabia Saudí).
El Ministerio del Interior saudí ha confirmado que el ataque de las fuerzas yemeníes a Najran ha dejado un muerto y seis heridos.
Entre tanto, fuentes militares yemeníes han hecho público que los cazas bombarderos saudíes han atacado más de 20 veces la parte norteña de Saná, la capital de Yemen. Los bombardeos han ocurridos este sábado por la mañana.
El portavoz del Ejército yemení, el general de brigada Sharaf Luqman, enfatizó el viernes la firme decisión de las fuerzas yemeníes de continuar con sus ataques a posiciones militares saudíes en represalia por su agresión a Yemen.
Según un informe publicado recientemente por el diario saudí Al-Watan, desde el inicio de la ofensiva saudí contra Yemen, 14 mil misiles han sido lanzados contra Arabia Saudí.
El 26 de marzo de 2015, Arabia Saudí emprendió una campaña militar contra Yemen, sin el aval de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pero con la luz verde de EE.UU., en un intento por restaurar en el poder al dimitido y prófugo presidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, un fiel aliado de Riad.
Las últimas estadísticas de las Naciones Unidas confirman que la guerra iniciada por Arabia Saudí en Yemen ha dejado ya, entre muertos y heridos, más de 32.000 víctimas, en su mayoría civiles.
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