viernes, 19 de agosto de 2016

Cómo lograr que Siria y Turquía dialoguen y por qué ello es importante


La crisis siria no podrá resolverse solo por medios militares, debido, entre otros factores, al continuo apoyo de Arabia Saudita, Catar y Turquía que reciben los islamistas radicales, opina un experto ruso.

La derrota de los grupos islamistas radicales en la provincia de Alepo puede marcar un cambio radical en el escenario bélico sirio y el comienzo de su fase final, sostiene el presidente del Instituto de Oriente Próximo, Yevgueni Satanovski. En un artículo para el portal VPK, Satanovski destaca la importancia para el proceso de la paz en Siria de que Damasco y Ankara dialoguen y analiza las formas de posibilitarlo.

En primer lugar, el orientalista ruso sugiere prestar atención a las observaciones de los grupos de expertos chinos, que siguen lo que está sucediendo en Alepo con tanta atención como los estadounidenses. Sin embargo, a su juicio, aquellos son más fiables por la imparcialidad de Pekín, que no tiene intereses propios en juego en el conflicto sirio.
El papel de Ankara

Según fuentes chinas, en la situación de Alepo es especialmente importante el papel de Ankara. Se estima que varios centenares de 'voluntarios' –las unidades militares especiales de las Fuerzas Armadas de Turquía– se encuentran actualmente en Alepo y que alrededor de un centenar de turcos puden haber muerto como resultado del bombardeo de la ciudad.

Asimismo, analistas chinos calculan que en los últimos dos años, los combatientes extremistas en territorio sirio han recibido de Catar, Arabia Saudita y Turquía armas y municiones por más de 1.500 millones de dólares.
Necesidad de diálogo

En opinión de Satanovski, la crisis en Siria no podrá resolverse por medios puramente militares debido al desequilibrio demográfico y confesional en el país y al conflicto entre sunitas y chiitas, además de al continuo apoyo "de los principales patrocinadores del movimiento islamista sunita" en Siria: Arabia Saudita, Catar y Turquía.

Sin embargo, según el presidente del Instituto de Oriente Próximo, esta alianza tiene una parte vulnerable: Ankara, que, en sus palabras, "en el contexto de la mejora en las relaciones ruso-turcas y cierto enfriamiento con Occidente será flexible en Siria".

En el diálogo entre Turquía y Siria, el objetivo más importante, de acuerdo con el analista ruso, es que Ankara deje de apoyar alFrente Al Nusra.

A cambio, las fuerzas del presidente Bashar al Assad y la aviación rusa pueden dejar los bombardeos de los grupos proturcos "que no se hayan visto comprometidos en atrocidades yihadistas", opina Satanovski. En el futuro, agrega, incluso se podría hablar de la incorporación de figuras políticas moderadas proturcas en la estructura administrativa estatal de Siria.

La iniciativa en este proceso debe pertenecer a Ankara y Damasco, mientras que Moscú tendría el papel de mediador principal, detalla el analista.
Efecto dominó

De lograrse este diálogo, el apoyo de las fuerzas 'antiAssad' por parte de Catar y Arabia Saudita se desvanecería, pronostica Satanovski.

En este sentido, el experto explica que la alianza entre Riad y Ankara "es temporal y está dictada exclusivamente por los intereses comunes en la cuestión siria". Por otro lado, afirma, ambos Estados tienen controversias, por ejemplo en relación al papel de la Hermandad Musulmana en la vida política del mundo islámico.

Además, Ankara y Damasco tienen puntos y preocupaciones comunes tales como las ambiciones separatistas de los kurdos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario