miércoles, 18 de julio de 2018

Izada bandera nacional siria en el municipio de Bousra Al-Sham en Deraa


Fue izada la bandera nacional siria en la plaza central de Bousra Al- Sham, la mayor ciudad en el campo este de la provincia de Deraa.
El gobernador de Deraa, Mohammad Khaled Hanous, izó la bandera en presencia de cientos de civiles y de una unidad de efectivos de las Fuerzas de Seguridad Interna.
En declaraciones a la prensa, Hanous dijo: “Izamos la bandera siria en la ciudad más antigua del sur de Siria donde vivían musulmanes y cristianos que participaron juntos en la construcción de esta ciudad”.
Agregó que la liberación de la ciudad fue gracias a los sacrificios del ejército sirio y los esfuerzos de los amigos, indicando que las autoridades de Deraa han tomado todas las medidas posibles para ayudar a los refugiados para que regresen a sus casas.
Bousra Al-Sham es un municipio ubicado a unos 40 km de la ciudad de Deraa y 20 km de la frontera con Jordania, fue un punto estratégico importante y uno de los bastiones más grandes de los terroristas en el sur de Siria.








SIRIA: Decenas de autobuses y ambulancias llegan a Kafraya y Foa para evacuar a los civiles


Decenas de autobuses y ambulancias entraron en las localidades de Kafraya y Foa en la provincia de Idleb, para sacar a los civiles asediados por los terroristas en esas dos localidades.
En este contexto, el reportero de SANA informó que más de 121 autobuses acompañados por decenas de ambulancias de la Media Luna Roja Árabe Siria entraron a través del paso de Al-Eis en el campo sur de la provincia de Alepo.
Fuentes fidedignas habían informado ayer el martes sobre el alcance de un acuerdo para la liberación del total restante de secuestrados del poblado de Ishtubruk, y también a miles de civiles asediados de los poblados de Kafraya y Foa, en el campo de la provincia de Idleb.
El alcance de este acuerdo viene dos meses después de la liberación de 42 secuestrados de Ishtubruk y cinco civiles de Kafraya y Foa, como parte de un acuerdo para la liberación de los secuestradores de Ishtubruk y los civiles asediados en Kafraya y Foa.
Los terroristas del Frente Al-Nousra cometieron el 26 de abril del año 2015 una masacre en el pueblo de Ishtubruk, donde los terroristas invadieron el poblado y mataron a casi 200 civiles y secuestraron a otros cientos, incluyendo familias enteras, mientras otros cientos de residentes del pueblo lograron huirse a las zonas seguras por medio de tractores y vehículos agrícolas.
A finales del pasado mes de abril, se alcanzó un acuerdo para sacar a los terroristas del campamento Yarmouk para refugiados palestinos hacia Idleb a cambio de liberar los asediados en las localidades de Kafraya y Foa que se estiman en 5000 y liberar a 85 mujeres y niños de los secuestrados del poblado de Ishtubruk.

Dirigente campesino haitiano: "La situación social es una bomba, con un poquito de fuego explota"


En una entrevista exclusiva, Jean-Baptiste Chavannes, líder social de Haití, analizó las protestas recientes en su país por el aumento del precio de los combustibles.

El pasado 6 de julio estallaron masivas protestas en Haití contra el alza en el precio de los combustibles en el marco de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Además de manifestaciones callejeras, hubo saqueos a comercios y represión por parte de las fuerzas de seguridad. Finalmente, la situación derivó en la renuncia del primer ministro, Jack Guy Lafontant, quien había sido el responsable del anuncio.

"Podemos decir que esta protesta es fruto de una situación de miseria estructural", explicó a este medio Jean-Baptiste Chavannes, dirigente de la organización campesina haitiana Mouvman Peyizan Nasyonal Kongrè Papaye (MPNKP). Desde su punto de vista, no se trata solo de los aumentos, que alcanzaron subas de entre el 38% y el 51% en naftas, gasoil y kerosene. "Este Gobierno llegó hace 17 meses y es la continuación del de Michel Martelly al servicio de la oligarquía nacional", opinó.

En ese sentido, explicó que el actual presidente Jovenel Moïse recibió financiamiento para su campaña electoral de "una fracción de la burguesía comercial y financiera". Por eso ahora "está recibiendo órdenes de ese sector y del FMI".



Cabe recordar que Moïse obtuvo el 55,6% de los votos y venció a 26 candidatos en unas elecciones en las que participó apenas el 21% del electorado. Tras el recuento de votos, el Consejo Electoral reconoció que "hubo irregularidades", pero dijo que no "fraude masivo" como había denunciado la oposición. Estos fueron los segundos comicios en un año, ya que la votación de 2015 fue impugnada y anulada luego de violentas protestas.

No obstante para Chavannes, el mandatario "está en la ilegalidad" e insistió en que "fue una elección con fraude". "Según nuestra evaluación tenía alrededor de 250.000 votos sobre seis millones, entonces no tiene ninguna legitimidad", añadió y explicó que por eso "se están utilizando los fondos del Estado para hacer propaganda" y así buscar legitimar el Gobierno.


Pobreza, miseria y dependencia

Haití es, desde hace décadas, el país más pobre de todo el continente americano. A eso se ha sumado una constante inestabilidad política, catástrofes humanitarias provocadas por huracanes, el famoso terremoto de 2010que destruyó gran parte de su infraestructura y los abusos provocados por las misiones internacionales tanto de Naciones Unidas como de otros organismos. Incluso esta ocupación militar trajo una crítica epidemia de cólera de la mano de los cascos azules.


Un auto de la policía haitiana cerca de una barricada en Puerto Príncipe, el 9 de julio de 2018. 

Frente a este escenario, el dirigente campesino apuntó que se trata de un país "totalmente dependiente de la ayuda internacional, de una parte de los Gobiernos imperialistas y de las instituciones financieras internacionales". También resaltó que "no se está produciendo casi nada" y actualmente se importan "más del 60% de los alimentos, hay una devaluación permanente de la moneda nacional y el Gobierno no llega a pagar los sueldos de los empleados, ni siquiera de la policía".

Todo esto ha provocado "una crisis general y generalizada". "Eso es estructural, es una crisis del sistema capitalistay del tipo de Gobierno de Haití", afirmó. Asimismo, alertó sobre el proyecto de privatización de la electricidad que hoy "está en manos de una compañía del Estado".

"Podemos decir que esta protesta es fruto de una situación de miseria estructural"    Jean-Baptiste Chavannes, dirigente campesino haitiano

"Los Gobiernos pasados han privatizado todo. Ahora el plan es la privatización total, hasta los servicios como la salud y la educación", señaló.


Perdió Brasil y estallaron las protestas

Respecto al incremento del combustible, Chavannes recordó que no es algo nuevo y que el FMI lo solicita de manera recurrente para que acompañe el precio internacional del petróleo. El problema es que cuando aquel baja, "eso no se refleja en el resto de los precios en el país".

Además, subrayó un detalle llamativo. El acuerdo había sido firmado en marzo de este año pero el Gobierno "estaba esperando la Copa Mundial de fútbol para aplicarlo". De hecho, el anuncio se hizo mientras Brasil estaba jugando contra Bélgica por los cuartos de final.

Protesta en Puerto Príncipe, Haiti, el 14 de julio de 2018. 

"Los haitianos son brasileros y argentinos", contó el líder campesino, explicando que cuando hay una competición en la que juegan Argentina o Brasil, "el pueblo haitiano está prestando atención", pero cuando ambos quedan afuera "se acabó la competición".

"Mientras se jugaba el partido se difundió el comunicado pero Brasil perdió y entonces el pueblo salió a las calles en contra de esta medida", bromeó Chavannes.

Cabe recordar que antes del incremento de los combustibles, el país ya se encontraba convulsionado por un reclamo de aumento de salarios de los trabajadores. A pesar de que el salario mínimo del país es de 350 gourdes (aproximadamente 5 dólares), el dirigente social sostuvo que el promedio real ronda los 3 dólares y la pretensión de los sindicatos es elevarlo a 15.

"La situación social es una bomba, con un poquito de fuego explota y es lo que pasó el 6 y 7 de julio"Jean-Baptiste Chavannes, dirigente campesino haitiano

"Eso genera una protesta permanente a nivel de los trabajadores, de los profesores, de los empleados de salud, de la policía", analizó el entrevistado. "La situación social es una bomba, con un poquito de fuego explota, y es lo que pasó el 6 y 7 de julio", añadió.


Cambiar el Gobierno o pensar otro tipo de Estado

Jean-Baptiste opinó que el hecho de que haya renunciado el primer ministro no es suficiente y, de hecho, señaló que también debería irse el presidente Moïse. Aún así, consideró que "cambiar de Gobierno no quiere decir nada" porque el país no tiene "independencia real".

Además, sostuvo que "la burguesía haitiana tiene como proyecto comprar y vender productos que vienen de EE.UU." con el mero objetivo de "ganar más plata sin esfuerzo, sin inversión en la producción".


Un policía haitiano remueve un neumático de una barricada en Puerto Príncipe el 8 de julio de 2018. 

"Hay una fracción de los grupos políticos que quieren que Jovenel se vaya para llegar ellos al poder y seguir haciendo la misma cosa. Pero la mayoría de la población está pidiendo un gobierno de transición", aseguró. Y dijo que desde las organizaciones populares están planteando que se realice una "Conferencia Nacional Soberana" para decidir "qué tipo de Estado" hay que construir.

La Conferencia Nacional pasaría a ser la responsable de "definir poco a poco los pasos" para llegar a un "nuevo sistema de Estado". Chavannes comprende que "eso no quiere decir la misma cosa para todo el mundo", por eso planteó tomarse "dos o tres años" para "darle la palabra a todos los sectores del país y llegar a acuerdos".

Desde su mirada y la de su organización, aclaró que su lucha "es por el socialismo". Pero por eso se debe "aprovechar este momento para juntar fuerzas y participar en la definición de un nuevo proyecto", concluyó.

La intervención militar a Venezuela: un análisis a profundidad


En vísperas del 5 de julio, Día de la Independencia de Venezuela, una noticia volvió a poner sobre la mesa el deseo de Estados Unidos de intervenir militarmente el país suramericano. No fue azarosa dicha publicación, la intención era opacar el acostumbrado desfile militar y el anuncio de cambios en el Ministerio de Defensa.
El panorama luce complejo y resulta necesaria una voz que permita aclararlo. Para ello, decidí entrevistar a Jesús Mieres Vitanza, director del laboratorio de ideas Topo el Molino, agrupación que realiza constante monitoreo sobre la agenda latinoamericana y mundial en materia de política exterior, estudios estratégicos y seguridad.
Nos recibe en una oficina coronada por una biblioteca donde asoman las obras completas de Carl von Clausewitz, John Rawls y Rousseau. Una pizarra verde y anacrónica le sirve para hacer diagramas que apoyan las respuestas de mis preguntas. Se disculpa por usar tiza y no marcadores. Un café brinda el clima perfecto para comenzar.
José Negrón Valera: Hace unos días, Associated Press publicó información sobre una reunión en la Casa Blanca en el 2017 donde Trump habló sobre la posibilidad de invadir Venezuela. ¿Cree posible una intervención militar de Estados Unidos en el país?
Jesús Mieres Vitanza: Una intervención militar de Estados Unidos en contra de Venezuela es una posibilidad real dentro del corto, mediano y largo plazo. Sin embargo, es una posición que responde a un paradigma político que está en desuso. Con esto quiero decir, que desde el paradigma que algunos autores han llamado poswestfaliano, una intervención estadounidense en contra de Venezuela no será solamente militar, ya que a partir del 2001 la concepción de la guerra mutó de estar vinculada estrictamente a lo militar, hacia un enfoque holístico en donde se puede hacer desde cualquier dimensión.
Frente a esto debemos preguntarnos: ¿no nos han intervenido ya Estados Unidos? Yo diría que ya lo hicieron y que lo militar solo sería un medio más, dentro de las distintas formas que tienen de atacar a Venezuela. Sin embargo, el medio militar representa un alto costo mediático para Washington en la región, en tanto que este curso de acción le restaría, aún más, confianza y liderazgo en Latinoamérica.
JNV: ¿Cuál sería la naturaleza de dicha intervención?
JMV: Luego de la publicación de Imperio de Michael Hardt y Antonio Negri en el año 2000, comprendimos que era real la existencia de una fase de transición del imperialismo. Con esto quiero decir que, actualmente, existe un 'Imperio' formado por Estados Unidos que va más allá de sus límites geográficos y opera en conjunción con sus aliados políticos estratégicos, ONG y diferentes empresas multinacionales.

Venezuela, lista para convertirse en "otro Vietnam" para EEUU
Cada día, los límites de este 'Imperio' van expandiéndose, convirtiendo a toda la humanidad en parte de él. No es una expansión geográfica, sino, por el contrario, es abstracta. Es una expansión en dimensiones como lo cultural, lo idiomático, los estilos de vida, las formas de pensar e incluso la dominación biopolítica como lo estableció Foucault; y todo lo que este fuera de este imperio será considerado por él como lo bárbaro, lo negativo, lo que debe ser erradicado, o lo que debe ser 'civilizado' desde los valores afines a dicho 'Imperio'.
Es a partir de este planteamiento que podemos responder cómo puede ser la naturaleza de la invasión estadounidense en contra de Venezuela, porque desde la victoria electoral de Hugo Chávez en 1999, Caracas se ha convertido en un ícono en contra del 'Imperio'. Lo que significa que la guerra que aquí se libra en resistencia a Estados Unidos, ellos la ven como una guerra en contra de los bárbaros.
La naturaleza de la lucha que lleva a cabo Venezuela en contra de Estados Unidos es una guerra en contra de la guerra misma. Por lo cual es importante comprender la estrategia que tienen las diferentes organizaciones, agencias e instituciones del país norteamericano, ya que harán la guerra con unas características particulares, en donde lo militar será simplemente una arista de toda la gran táctica.
JNV: ¿Qué condiciones deben suscitarse para que ocurra una intervención o ataque militar como el que describe?
JMV: Las condiciones ya están dadas. Somos una amenaza por tener valores, mentalidades, objetivos, ideología y socios estratégicos diferentes a Estados Unidos. Es la misma razón por la que digo que los intereses de Washington van más allá de la intención de controlar algún producto estratégico para ellos. Se trata de lograr someter, incluso de manera ontológica, a una nación que no está alineada con una forma epistémica de pensar.
JNV: ¿Cuál cree que serían las consecuencias a nivel local y regional?
JMV: Las consecuencias ya las estamos viviendo. No solo en el plano económico, con la ausencia de ciertos productos, sino en espacios más abstractos. Con esto me refiero a que ya hay una gran cantidad de personas que se encuentran psicológicamente afectadas por la incertidumbre de su día a día. Nos encontramos aislados de otros países y naciones, de formas de pensar, por tanto hay un aislamiento inclusive del acceso a las ideas. No podemos comprender lo que vivimos si no logramos tener otras perspectivas de la misma realidad.
No lo digo solamente por una cuestión geográfica, sino también porque el hecho de que no nos podamos conectar con los principales tanques pensantes del mundo implica no tener acceso a la información de cómo ellos esperan hacer la guerra contra nosotros. Por eso digo que las consecuencias a nivel local y regional son devastadoras. En principio, porque vivimos con un relativismo muy marcado. Existen muchas personas que dudan de lo que es bueno o malo, social, económica, ideológica e incluso militarmente. Sin embargo, también podemos observar que la desvinculación con la 'otredad' venezolana nos limita nuestra propia imaginación y eso nos llevará a que para algunos sea difícil conseguir soluciones.
JNV: ¿Muchos consideran que Colombia sería la plataforma de ataque contra Venezuela? ¿Qué papel jugaría las FARC a su juicio?
JMV: Es probable que Estados Unidos utilice a Colombia como plataforma de ataque contra Venezuela. Es probable también que la estrategia de una operación como esta sea generar ingobernabilidad y desconexión con el 'heartland' venezolano, es decir, Caracas.
Sin embargo, es importante analizar el papel de los diferentes grupos que hacen vida en las zonas más cercanas a la frontera venezolana. Es el caso de las FARC, pero también de otros grupos, como las Autodefensas de Colombia, bandas criminales y agencias estatales que operan de manera clandestina en el lado colombiano de la zona fronteriza de Venezuela.
Por eso, analizar la participación de los grupos no convencionales que podrían ser actores activos de un conflicto como este es una tarea difícil debido a que habría que analizar cada uno de sus intereses. Sin embargo, su actuación podría ser decisiva a la hora de hacer un costo-beneficio para cada una de las partes involucradas, es decir, Colombia, Venezuela y Estados Unidos.
JNV: ¿Cuál cree usted que sería la respuesta de parte de potencias aliadas a Venezuela como Rusia y China ante un ataque a Venezuela? ¿Qué tipo de ataque tendría que sufrir el país para que ellos se movilicen? ¿Ve la posibilidad de que apoyen militarmente o solo lo harían en términos diplomáticos?
JMV: La participación de las potencias globales es importante. Debido a que actores como Rusia y China son aliados estratégicos de Venezuela. Esto quiere decir que su participación dentro del desarrollo político venezolano es activa, debido a que tienen inversiones y contratos a largo plazo con nosotros. Esto ha sido una estrategia importante del Estado venezolano, ya que ha logrado vincular la política interna propia con la política exterior de estos dos grandes países.
En caso de una acción militar estadounidense dentro del territorio venezolano, Rusia y China tendrán una participación activa dentro del conflicto, principalmente porque sus intereses comerciales y económicos se verán afectados de manera directa. Queda a responsabilidad de todos los funcionarios vinculados con la política exterior venezolana vincular de mayor manera a estos dos grandes países, para que su participación sea a favor de Venezuela y no al contrario.
JNV: ¿Tiene Venezuela la capacidad militar de responder a un posible ataque por parte de Estados Unidos?
JMV: En ninguna parte del mundo una táctica puede ser victoriosa si se cuenta con una mala estrategia. La Fuerza Armada Nacional Bolivariana ha hecho grandes esfuerzos por modernizar todo el sistema de armas venezolano y mantenerlo en condiciones óptimas. Pero quizás la ventaja más importante que tiene Venezuela es saber quién es su enemigo, reconocer cómo pueden ser todos los escenarios bélicos que puedan existir, haber hecho una distribución de cada una de las regiones estratégicas y una doctrina de defensa para cada una de ellas y mantener la moral del combatiente suficientemente alta y clara con los objetivos de la región.
Venezuela ya tiene preparada una respuesta militar a un posible ataque de Estados Unidos. Sin embargo, el campo de batalla deberá entenderse y adecuarse en un planteamiento clausewitziano. Es decir, lograr comprender de manera inmediata cuál es el punto de gravedad de ese ejército invasor para poder acabar en un corto tiempo con esa intervención extranjera. Con el objetivo estratégico de volver a tener control sobre el territorio y minimizar las pérdidas humanas y de recursos.
JNV: ¿Cree que Estados Unidos intente acciones de violencia con el fin de avanzar en lo que analistas como Thierry Meyssan llama la balcanización o destrucción del Estado-nación venezolano?
JMV: Considero que Estados Unidos podría intentar cualquier tipo de acción solo con el fin de desestabilizar a Venezuela y acabar con el Gobierno bolivariano. Sin embargo, creo que primero intentarán conseguir un control total del territorio a través de diferentes maniobras políticas, antes de desmembrar al Estado. Principalmente porque al destruir el Estado-nación corren riesgos estratégicos como es el caso de la participación de potencias como Rusia y China en cualquiera de las naciones nacientes.
JNV: ¿Qué debe hacer el Estado venezolano para evitar una intervención y también durante la misma? ¿Cuáles serían sus recomendaciones como experto en filosofía de la guerra?
JMV: La Fuerza Armada Nacional Bolivariana ha hecho grandes esfuerzos por hacer estudios sobre cómo podría ser la actuación de Venezuela dentro de un conflicto militar que implique la invasión del territorio nacional.
No obstante, una posición muy valiosa de la doctrina actual es considerar que ya los estadounidenses, aunque no hayan intervenido militarmente, día a día asedian a Venezuela con el fin de desestabilizar a la nación y generar caos en grandes magnitudes que consolide un estado de ingobernabilidad que justifique lo que ellos han llamado las 'intervenciones por ayuda humanitaria'.
Generar nuevos enfoques estratégicos, e incluso comprender los enfoques del enemigo ayudarán a asegurar una respuesta efectiva por parte de la FANB en cualquier ámbito nacional que se encuentre vulnerable o vulnerado por una amenaza extranjera.
La entrevista concluye cuando las notificaciones del celular confirman que un juez brasileño ha ordenado la inmediata liberación de Lula —el líder brasileño que se mantiene como favorito para ganar las elecciones generales en octubre— y que otro juez pretende mantenerlo en prisión.
"Se vienen tiempos interesantes en Brasil", pienso en voz alta. Mieres Vitanza me escucha sin inmutarse, se apresurar a garabatear en su pizarra los próximos escenarios que se abren en el futuro de la región y promete comentarme los resultados. Le agradezco el gesto mientras termino una tercera taza de café.

El amargo cautiverio: yazidíes secuestradas por ISIS relatan su calvario


Una de las páginas más oscuras del grupo terrorista ISIS o Daesh (autoproclamado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países) es el sistemático genocidio del pueblo yazidí y el secuestro de mujeres con el fin de convertirlas en esclavas sexuales.

Hina Abbas Khalaf es una adolescente yazidí de 15 años natural de Sinjar, Irak, que fue secuestrada por combatientes de ISIS junto a sus hermanas cuando los terroristas tomaron la ciudad en agosto de 2014.

Al cabo de cuatro años tuvo la suerte de ser liberada gracias al pago de un rescate de 16.000 dólares, con lo cual estuvo en cautiverio casi cuatro años, desde agosto de 2014 hasta el 19 de febrero de 2018, y durante este tiempo fue vendida en tres ocasiones.

​Sputnik tuvo la posibilidad de conocer de primera mano sus desventuras tras conversar con ella y su hermana.

Cuatro dueños en cuatro años

El primer propietario de Hina fue un sirio llamado Al Shadad, quien se llevó a Hina de Irak y la obligó a acompañarlo por toda Siria.

Durante este periplo la niña estuvo en Al Raqa, Deir Ezzor, Mayadin y otras.

El extremista la obligaba a aprenderse el Corán, convertirse al islamismo, le exigía orar y le golpeaba si desobedecía, para luego poder venderla a otro extremista.

"Lo recuerdo especialmente, era un violador, un kurdo iraquí de la provincia Solimania del Kurdistán iraquí, todos le llamaban Abu Ayman, aunque no supe nunca su nombre verdadero", relató la joven a Sputnik.

Hina recuerda los maltratos de que fue objeto durante este tiempo.

"Me golpeaba mucho y me maltrataba, podía dejarme sin comida durante varios días", relató.

Posteriormente el terrorista la vendió "a un libio que respondía al sobrenombre de Baqr al Nahli por 15.000 dólares".

"Este también me vendió, pero por 10.000 dólares, a otro miembro de ISIS procedente de Libia, que tenía como apodo Zakria", rememoró.

La joven recordó que "los dos últimos hombres eran bastante jóvenes, poco más de viente años".

"Ninguno de los dos estaba casado, a diferencia de Abu Ayman", relató.


Destino de las hermanas

Sputnik también tuvo la ocasión de conversar con la hermana mayor de Hina, Hanifah Abbas Khalaf, de 30 años.

Justamente ella logró pagar el rescate de sus tres hermanas, años después de que lograse escapar de su cautiverio.

"Cuando Hina y yo nos reunimos lloramos y nos abrazamos durante largo tiempo, ella me preguntaba sobre la familia, dónde y cómo estaban todos", confesó a la agencia.

Hanifah relató que no tuvo valor para comentarle enseguida sobre su padre, que "murió de pena".

"Tenía 50 años, sufrió un infarto cuando se enteró que su hija menor Wadhah, de 9 años, fue violada por terroristas de Daesh", dijo.

Según la mujer, su hermana Hina "tuvo dos abortos en Siria porque no quería tener hijos de terroristas, en aquella época era apenas una niña, pero se decidió".

La hermana relató que "todavía quedan en cautiverio dos hermanas nuestras, Basa, de 20 años, y la más pequeña, Wadhah".

"No sé nada de ellas, no sé qué les sucede, solo sé que están en algún lugar de Siria", dijo.

Las otras dos hermanas rescatadas, Leyla, de 20 años, y Zina, de 10, reciben tratamiento médico.

La mayor sufre problemas de salud debido a los maltratos y deberá ser operada.

Ambas están pasando un curso de rehabilitación psicológica en Alemania.


​El amargo cautiverio

Mientras buscaba a sus hermanas, Hanifah tuvo la ocasión de encontrarse con muchas jóvenes que lograron escapar o librarse del cautiverio.

Las muchachas le comentaron que muchas yazidíes fueron trasladadas a Turquía, donde les "lavaban el cerebro", les metían mentiras en la cabeza, las preparaban como terroristas suicidas para perpetrar atentados en Turquía.

"Ahora en Turquía hay muchas mujeres y niñas yazidíes, los extremistas amenazan al Gobierno turco para que coopere, porque de lo contrario harán cosas", dijo.

Los yazidíes son una minoría religiosa kurda que cuenta con unos 700.000 miembros repartidos entre Siria, Irak, Turquía, Grecia y el Cáucaso, la cual resultó cruelmente masacrada por los radicales de ISIS.

La fe que profesan los yazidíes, de carácter pagano, combina elementos del cristianismo, el islam y de varias creencias antiguas del Oriente Próximo.

La ciudad iraquí de Singal, con predominante población de kurdos yazidíes, fue tomada por ISIS en agosto de 2014, miles murieron, de cinco a siete mil mujeres se convirtieron en esclavas.

Una comisión de la ONU presentó en junio de 2016 en Ginebra un informe en que constató que ISIS cometió en Siria genocidio contra la etnia yazidí, crímenes de lesa humanidad y de guerra e instó a reconocer a nivel internacional el genocidio de esta etnia.

El documento fue elaborado basándose en las entrevistas de las personas que lograron sobrevivir en el cautiverio, de sacerdotes, activistas, contrabandistas, juristas, reporteros y personal médico.

Cien años del pacto secreto que diseñó Oriente Medio


El galés Thomas Edward Lawrence, arqueólogo, oficial militar y diplomático, más conocido como Lawrence de Arabia, fue enlace del Ejército británico con las tropas árabes del emir Faisal Ibn Husein, de la dinastía Hashemita, en la rebelión árabe contra el Imperio Otomano durante la Primera Guerra Mundial.

La insurgencia árabe fue alentada por los británicos, que junto a Francia, Rusia y otros aliados pretendían derrotar a los otomanos, respaldados por el Imperio austro-húngaro, el alemán y el reino de Bulgaria.

Lawrence de Arabia confiaba en el triunfo de la rebelión árabe y apoyaba la creación de un Estado árabe con capital en Damasco.

Éste era el futuro que los británicos habían presentado al jerife de la Meca, Husein bin Ali, padre de Faisal.

Las promesas quedaron recogidas en la correspondencia que Husein y Sir Henry McMahon, el alto comisionado británico en Egipto, intercambiaron entre 1915 y 1916.

En las misivas, el Reino Unido aceptaba reconocer la independencia de los árabes a cambio de que éstos ayudaran a Londres a luchar contra los otomanos.

Los árabes consideraron el contenido de las cartas de McMahon como un acuerdo.

"En esa época no había potencias regionales como ahora, estaban las superpotencias solas e intentaban dibujar el mapa según sus intereses y su equilibrio de poderes, y nos utilizaron", dijo a Sputnik Nóvosti el historiador Mahdi Abdul Hadi, presidente de la Sociedad Académica Palestina para el Estudio de Asuntos Internacionales (PASSIA).

"No creo que las élites árabes, ni los Hashemitas fueran ingenuos ni estúpidos: pidieron libertad e independencia a cambio de aliarse con los británicos y los franceses, y confiaron en ellos esperando que cumplirían su compromiso", señaló Hadi.

Pero los árabes no sabían que a sus espaldas, británicos y franceses firmaron un pacto para dividir Oriente Medio en áreas bajo su control o su influencia.

El trato pasó a la historia como Acuerdo Sykes-Picot (oficialmente denominado de Asia Menor) porque lo firmaron Mark Sykes, diplomático de la Oficina Británica de Guerra, miembro del Partido Conservador, y François George-Picot, diplomático francés.

En el acuerdo, británicos y franceses dividían el Imperio otomano en zonas que estarían en sus manos o bajo su influencia.

También establecían un control internacional en Palestina (excepto en una pequeña zona británica en los puertos de Haifa y Acre) y adjudicaban una parte del pastel a sus aliados rusos.

Gran Bretaña y Francia no fueron los únicos firmantes del acuerdo secreto, cuyos detalles se ultimaron en Petrogrado, en la Rusia zarista, y se firmó el 16 de mayo de 1916.

El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Sazonov, jugó un papel clave en el contenido del acuerdo.

Rusia, el tercer firmante, había logrado importantes victorias sobre los turcos.

Los rusos habían conquistado el nordeste de Turquía y se habían hecho con casi todo el territorio otomano que querían, excepto Constantinopla.

En el acuerdo entre Sykes, Picot y Sazonov, a los rusos se les adjudicaron Constantinopla, los estrechos, Armenia y el Kurdistán, pero nunca llegaron a controlar estos territorios, ya que en febrero de 1917 estalló la Revolución Rusa.

En noviembre de 1918 acabó la Primera Guerra Mundial con la victoria de la Triple Entente —Reino Unido, Francia, Rusia- y sus aliados, entre ellos EEUU, contra Alemania, el Imperio austrohúngaro, el Imperio otomano y Bulgaria.

Ese triunfo supuso el final del Imperio Otomano.

En la Conferencia de París, en 1919 los vencedores decidieron los términos de los tratados de paz que firmarían con cada uno de sus enemigos derrotados.

En el acuerdo Sykes-Picot no se definieron las fronteras de los Estados árabes: de hecho, el pacto hablaba de la existencia de un futuro "Estado árabe" o "una confederación de Estados árabes".

Las líneas de los mandatos tutelados por cada país se decidieron en la Conferencia de San Remo, en 1920, y sus conclusiones se plasmaron en el Tratado de Sèvres el mismo año.

No obstante, este tratado nunca entró en vigor por la aparición del movimiento nacional turco bajo el liderazgo de Mustafa Kemal Pasha.

En su ofensiva militar venció a Grecia, Armenia y las fuerzas francesas, recuperó casi todo lo que Turquía había perdido y obligó a los aliados a negociar de nuevo en Lausana en 1923.

Como consecuencia, los kurdos vieron frustrado su sueño de un Estado; las potencias internacionales habían previsto que celebraran un referéndum para decidir su futuro.

Los kurdos presentaron un mapa en la Conferencia de París, en 1919, que comprendía el Kurdistán turco, el iraquí, una porción pequeña de Siria y otra de Persia, pero el triunfo de Kemal vetó la existencia del Kurdistán.

Gran Bretaña, contrariamente a lo que indicaba Sykes-Picot, se quedó Palestina y la dividió en dos mandatos: Palestina y Transjordania, el territorio situado al oeste del río Jordán, que se convertiría luego en Jordania.

Con el tiempo, los británicos nombraron a Abdulá, otro hijo del jerife Husein, como rey de este territorio.

Los tratados internacionales incorporaron la Declaración Balfour (noviembre de 1917), una carta firmada por el Secretario de Relaciones Exteriores británico, Arthur James Balfour, impulsada por Sykes.

La misiva estaba dirigida al barón Lionel Walter Rothschild, uno de los líderes de la comunidad judía británica.

En ella, Balfour le comunicaba: "Su Majestad contempla favorablemente el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío".

El texto seguía: "Y hará uso de sus mejores esfuerzos para facilitar la realización de este objetivo, quedando bien entendido que no se hará nada que pueda perjudicar los derechos civiles y religiosos de las comunidades no judías existentes en Palestina".

Las promesas de los británicos a árabes y judíos eran incompatibles.

Los británicos se hicieron, además, con el mandato de Mesopotamia (luego Irak), incluida Mosul, que en el acuerdo Sykes-Picot estaba prevista para Francia.

Los franceses se quedaron con el mandato de Siria y Líbano, que en el futuro pasaría a ser un país independiente con un territorio mayor del previsto inicialmente.

En Damasco, Faisal Ibn Husein aprovechó el vacío de poder tras la derrota otomana y declaró un Reino Árabe en 1918 que fue abolido por los franceses al inicio de 1920.

Luego fue rey de Irak a instancias británicas por una revuelta de las comunidades iraquíes que exigían un gobierno propio.


El acuerdo Sykes-Picot destruyó los sueños y las aspiraciones árabes. "Es una de las razones básicas por las que hoy tenemos esta tormenta en Oriente Medio", indicó a Sputnik Nóvosti Alan Baker, experto en derecho internacional del Jerusalem Center for Public Affairs.

"Las fronteras creadas eran falsas, basadas en líneas dibujadas sin tener en cuenta las nacionalidades o los intereses culturales y demográficos", comentó Parker.

"Las potencias sabían perfectamente cuáles eran los deseos de los árabes porque la Comisión King-Crane (constituida en 1919 y lanzada por EEUU para conocer las aspiraciones de los pueblos en las áreas no turcas del Imperio otomano) visitó la zona y habló con sus habitantes", subrayó Hadi.

"Nunca se lo tomaron en serio ni actuaron según su ética, valores y principios respecto a la libertad, la independencia, los derechos humanos y las aspiraciones de los pueblos", añadió el historiador palestino.

Aunque matizó que "hoy en día no creo que estemos en disposición de juzgar o decidir qué estuvo mal hecho".

Al pacto Sykes-Picot se refirió en el 2014 Abu Bakr al Baghdadi, líder del Daesh (acrónimo árabe que designa al Estado Islámico, considerado terrorista por varios países, entre ellos Rusia).

Al Baghdadi afirmó al proclamar un califato en los territorios sirios e iraquíes bajo su dominio que había llegado "el final de Sykes-Picot" (un sueño que nunca cumplió).

Antes de Napoleón y Hitler: Carlos XII, el primero en perderlo todo por invadir Rusia


Se suele recordar la caída de la Francia napoleónica y la Alemania nazi como los ejemplos clásicos de decisiones fatales de invadir Rusia. Pero ellos no fueron los primeros en cometer este 'error'. Antes cayó el Imperio sueco.

El Imperio sueco del siglo XVII podría seguir siendo una de las grandes potencias europeas… si no fuera por su decisión de tratar de conquistar Rusia, recuerda National Interest.

El autor Michael Peck, reflexiona en su artículo sobre el destino del Imperio sueco y escribe que hace cuatro siglos Suecia era una gran nación y una potencia militar europea.

Genios de la organización bélica

A principios del siglo XVII, el rey sueco Gustavo Adolfo, considerado como un genial comandante militar, modificó su Ejército convirtiéndolo en una entidad permanente y profesional.

Mientras los ejércitos europeos de la época estaban formados por campesinos poco entrenados y malnutridos, así como de unidades por mercenarios sin disciplina alguna, las bien entrenadas tropas permanentes de Gustavo Adolfo podían realizar maniobras eficientes. Además, estaban dotadas de armas de fuego y contaban con artillería ligera, adaptada para el apoyo de las ofensivas de la infantería.

Al salir victoriosos de de la Guerra de los Treinta Años de 1618-1648 en la que estaban a punto de conquistar hasta Praga y Viena, Suecia se convirtió en una potencia importante, con territorios que forman parte de las contemporáneas Alemania, Polonia y el Báltico, incluidas las tierras del actual noroeste de Rusia.

'Reconquista' a lo escandinavo

En 1697 Carlos XII, de 15 años, heredó el Imperio sueco. La juventud del monarca llevó a las naciones vecinas a tratar de reconquistar las tierras perdidas e impedir el auge del potente rival.

Así, se formó la Alianza del Norte, integrada por el Reino de Dinamarca y Noruega, Sajonia, Polonia y Rusia. En 1700, se desató un conflicto que duraría 21 años y entraría en la historia como la Gran Guerra del Norte.

El inicio de la guerra resultó exitoso para los suecos. Su Ejército, considerado uno de los mejores de Europa y conducido por Carlos XII, llamado el Alejandro del Norte, devenido en talentoso estratega, logró repeler los ataques de la Alianza e incluso derrotó a los rusos en la ciudad estonia de Narva en 1700, provocando importantes cambios en las tácticas y la estructura de las fuerzas armadas de Rusia, encabezadas por Pedro el Grande.

Camino hacia el fin

En 1708 el joven Carlos XII decidió invadir Rusia para acabar con el rival e imponerse como la única gran potencia en Europa. El resultado fue desastroso.

La combinación del talento bélico de Pedro el Grande, los recientes avances militares, la táctica de la 'tierra quemada' y el omnipresente frío del invierno ruso, resultó capaz de contrapesar la disciplina y el genio táctico de los suecos.

Tras algunas victorias iniciales, el Ejército sueco empezó a sufrir derrota tras derrota. Carlos XII abandonó la idea de conquistar Moscú y se retiró a las tierras de la actual Ucrania para pasar el invierno. Allí, bajo constantes ataques de las tropas rusas y sin un abastecimiento adecuado, su Ejército contaba sus días.

La catastrófica derrota en la batalla de Poltava allanó el camino hacia el fin del poderío militar y político sueco. Una docena de años (entre 1709 y 1721) tardó en materializarse la puesta del sol del Imperio sueco y el fin de una época, que los propios escandinavos hasta ahora llaman 'el período del gran poder'.

Regreso a casa del cuerpo del Rey Carlos XII de Suecia

El título del Imperio lo 'heredó' Pedro el Grande para su país en 1721, tras el fin de la Gran Guerra del Norte, proclamando el Imperio ruso con capital en la recién construida ciudad de San-Petersburgo.

Un siglo después, la invasión francesa de 1812 inició la caída del imperio napoleónico, abriendo paso a Rusia como potencia mundial. A mediados del siglo XX, otro imperio —el Tercer Reich de la Alemania nazi— se aventuraba a una nueva invasión al interior de la entonces Unión Soviética, en una guerra que concluyó con la toma de Berlín por el Ejército Rojo, convirtiendo a la URSS en una de las dos mayores superpotencias del mundo, además de EEUU.

En este sentido, el fracaso de la invasión sueca coincide perfectamente con sus análogos históricos.

"Carlos XII no pudo predecir el destino de Napoleón e Hítler. La cuestión es otra: ¿por qué estos dos no lo pensaron dos veces antes de intentar invadir Rusia?", concluye el autor su viaje en la historia.

Los Dobrynin de Tula: la dinastía de los alcaldes de la 'capital de las armas' rusa


Tras contar la historia de Eugenio Dobrynin, sucesor de una familia de nobles del Imperio ruso que emigró durante la Revolución, Sputnik le cuenta más sobre los ancestros de esta ilustre saga y aprovecha la ocasión para presentarle la heroica ciudad de Tula, cuna de la industria armamentística rusa.

Durante su entrevista con Sputnik, Eugenio mencionó a su ilustre ancestro Nikolái Nikitich Dobrynin, que fue gobernador de Tula en la primera mitad del siglo XIX.

Nikolái Nikitich Dobrynin, el gobernador de la ciudad rusa de Tula del siglo XIX

En total, Dobrynin gobernó Tula durante 25 años y contribuyó mucho al desarrollo de la ciudad, que a lo largo de toda su historia —siendo, además, una de las más antiguas del país— tuvo una importancia estratégica para el Estado ruso.

Pero no fue el único Dobrynin que estuvo al frente de la ciudad: cuatro miembros más de esta saga familiar fueron elegidos alcaldes de Tula en el siglo XIX.

La gran importancia que Tula ha tenido para la historia de Rusia —su primera mención data del 1382 mientras que hay menciones aisladas que se remontan hasta el año 1146— implica también que haya sido una prioridad que la ciudad tuviera buenos gobernantes.

La protectora de Moscú

Por su ubicación estratégica, al sur de la capital, Tula tuvo un papel natural como línea de defensa de Moscú, algo que fue determinante para la historia de la urbe.

Fundada como una fortaleza y puesto administrativo, Tula se desarrolló desde sus inicios con un marcado acento bélico, guerreando contra pueblos nómadas y otros invasores. Además, desempeñó un papel importante en los conflictos internos que sufrió Rusia.

Durante el llamado Período Tumultuoso de la historia del país eslavo (1598-1613), fue escenario de varias sublevaciones contra el zar Basilio IV, además de ser testigo del surgimiento de dos impostores que aseguraban ser los legítimos pretendientes al trono de Rusia.

Período Tumultuoso: "Los agentes de Dmitri el Impostor asesinan al hijo de Borís Godunov", obra del pintor ruso Konstantín Makovskiy, 1862

No obstante, hacia el final de la también llamada Época de la Inestabilidad, los habitantes de Tula participaron en la insurrección popular contra la intervención polaca en Rusia, que culminó con la liberación de Moscú.

La cuna de la industria armamentista rusa

Con la expansión de las fronteras del país, Tula perdió su estatus de fortaleza fronteriza y se convirtió en un importante centro comercial e industrial, sobre todo de la industria metalúrgica, próspera gracias a los yacimientos de metales de la zona.

Acompañando a la metalurgia, creció también la industria armamentista, impulsada por excelentes artesanos herreros.

El escudo de Tula refleja sus tradiciones herreras y armamentistas


Precisamente en Tula, en 1712, en plena Gran Guerra del Norte, el zar ruso Pedro el Grande ordenó crear la primera fábrica estatal de armas, consolidando así todo el potencial industrial de la ciudad y aprovechando la experiencia de los artesanos locales.

Según indicó Eugenio Dobrynin, entre los primeros herreros artesanos figuraban sus ancestros, algo que quedó reflejado en el escudo heráldico de su familia: dos martillos con dos granadas.

La imagen heráldica de los Dobrynin: los martillos con dos granadas

La Fábrica de Armas de Tula existe hasta el día de hoy y es la productora de armas más importante de Rusia y una de las más conocidas del mundo.

Entre sus productos históricos y contemporáneos destacan los legendarios fusiles Mosin y el fusil de asalto AK-47, así como el sistema de misiles antitanque Kornet y el sistema cañón-misil antiaéreo Pántsir, entre otros avanzados sistemas bélicos.


La familia Dobrynin

Los comerciantes Dobrynin participaron activamente en la vida política y social de Tula. El primero de los Dobrynin que encabezó la cuidad fue Nikita Kondratievich Dobrynin, alcalde entre 1804 y 1806.

El padre de Nikolái Nikitich, Nikita Andréevich Dobrynin, también desempeñó el cargo de alcalde en 1829-1831 y en 1834-1837.

El mismo Nikolái Nikitich, además de ocuparse de la gestión administrativa, prestó especial atención a los problemas que afrontaban los huérfanos en aquella época e impulsó la creación de un monasterio masculino, además de crear el mayor centro de cría de caballos de toda la provincia.

Todas estas entidades todavía existen y funcionan en Tula.

Su pariente Piotr Ivanovich, también elegido varias veces alcalde de Tula en la segunda mitad del siglo XIX, fue uno de los fundadores de la fundación benéfica La Merced.

En 1861, tras la abolición de la servidumbre en Rusia, la familia de los Dobrynin abrió en Tula un banco agrario, especializado en proporcionar a los campesinos liberados los recursos necesarios para comprar tierras.

En total, los miembros de la familia gobernaron Tula durante 40 años.

Por su impecable servicio no solo se le otorgó a la dinastía el título hereditario de ciudadanos honoríficos de Tula, sino que también recibieron un título nobiliario.


La plena confianza del zar

Antes de ser coronado, el heredero del Imperio ruso —el futuro zar Alejandro II— solía visitar la casa familiar de los Dobrynin durante sus viajes por Rusia, y estaba al tanto de su labor al frente de Tula.

Tras asumir el poder, Alejandro II otorgó varios agradecimientos oficiales a la familia, algo que culminó con la entrega de un título nobiliario a los Dobrynin en 1879.

El mismo Nikolái Nikítich recibió el honor de ser invitado a la ceremonia de coronación del emperador Alejandro III.

Los Dobrynin entraron con paso firme en la historia de Tula y todavía son recordados en la actualidad. En 2011, con motivo del bicentenario del nacimiento de Nikolái Nikitich Dobrynin, en presencia de sus descendientes, fue inaugurada en Tula una placa conmemorativa que honra a toda la familia Dobrynin, ciudadanos honoríficos de la urbe que lo dieron todo para la prosperidad de su ciudad.

Fuegos artificiales en Tula con motivo del Día de la Victoria en la Gran Guerra Patria en 2016