“Hezbolá condena el bárbaro atentado terrorista contra la Mezquita del Imam Ali en Qadih, en Qatif (Arabia Saudí), que ha causado al menos 21 mártires y decenas de heridos y que tuvo lugar en el momento en que se realizaba la oración colectiva este viernes.
“Este crimen se añade a todos los que toman como blanco a mezquitas y centros religiosos en todo el mundo islámico. Estos crímenes son cometidos por grupos que no conocen el valor de la oración y que no respetan los lugares de culto ni la obligación de preservar la sangre de los inocentes, que son sacrificados en el altar de la ignorancia, el rencor y el odio confesional y sectario”, escribió Hezbolá en un comunicado.
“Los adeptos a la corriente terrorista takfiri no distinguen entre sunníes y shiíes ni entre musulmanes y no musulmanes a la hora de cometer sus crímenes. Ellos practican su barbarie contra todos partiendo de su doctrina excluyente que acusa a los que no piensan como ellos de “apostasía” y legitima su asesinato. Ellos comenten crímenes que pueden ser descritos como los más horribles vistos nunca a lo largo de la historia de la Humanidad y sirven también a los objetivos de las fuerzas enemigas de nuestra nación con premeditación”, subraya el comunicado.
Hezbolá imputó a las autoridades saudíes la entera responsabilidad de este crimen odioso, porque ellas “han apadrinado, albergado y apoyado a los criminales mediática, intelectual, política y materialmente en la comisión de crímenes similares en varios países árabes e islámicos, y también por haber faltado a su obligación de asegurar la protección de la región del Este (de Arabia Saudí) y haber incitado al odio contra los shiíes que viven allí desde las tribunas y los medios”.
Hezbolá “ofrece sus condolencias a las familias de los mártires inocentes que han caído en este atentado y desea a los heridos un próximo restablecimiento”.
El comunicado de Hezbolá concluye señalando que “la victoria estará del lado de los hombres pacientes y creyentes contra los opresores, los tiranos y sus instrumentos diabólicos”.
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La región de Qatif, al este de Arabia Saudí, ha sido atacada por el terrorismo este viernes. Una explosión se produjo a la hora de la oración del viernes en una mezquita shií de la Provincia del Este del reino, anunció el Ministerio del Interior saudí. Según el canal de televisión por satélite Al Alam, el ataque produjo la muerte de 21 mártires y heridas a 23 personas. Un total de 150 fieles se hallaba en el recinto en el momento de la explosión. El atentado destruyó una mezquita de la localidad de Qadih, provincia de Qatif, indicó el portavoz del Ministerio del Interior saudí. Según al Alam, que cita una fuente saudí, un atacante suicida, que llevaba un cinturón de explosivos, penetró en el interior de la mezquita donde se hizo explotar. Varios sitios de información del Este de Arabia Saudí han publicado fotos de cuerpos de víctimas bañados en su propia sangre. El hospital de Qatif había pedido donaciones de sangre. El portavoz del Ministerio del Interior saudí dijo que una investigación había sido abierta tras la explosión y prometió dar más detalles. La localidad de Qadih está situada al norte de la ciudad de Qatif, en el corazón de la Provincia del Este, donde se concentra la minoría shií, que sufre una abierta discriminación en numerosos campos en el reino wahabí. En esta provincia se concentran también las principales zonas petrolíferas del país. Arabia Saudí está en la actualidad al frente de una coalición de monarquías del Golfo que lleva a cabo ataques contra el Ejército y los shiíes del movimiento Ansarulá en Yemen desde hace dos meses. El EI ha reivindicado el atentado, que tuvo lugar poco después de que el líder del grupo terrorista, Abu Bakr al Bagdadi, hubiera llamado a la comisión de atentados dentro del reino. |
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