Los regímenes árabes pro occidentales han sido obnubilados por el materialismo decadente al que los invitan sus aliados, con la reciente creación de la fuerza militar conjunta definida contra Yemen, el eje sionista-americano contará, según el plan convenido, no solo con fuerzas terroristas extendidas y enfrentadas a las principales resistencias al proyecto-mundo de occidente, sino también con el apoyo explícito de quienes siempre han permanecido detrás de bambalinas en el teatro de operaciones ideado para Oriente Medio por yanquis, israelíes y la Europa de la decadencia.
Los regímenes árabes pro occidentales han sido obnubilados por el materialismo decadente al que los invitan sus aliados, con la reciente creación de la fuerza militar conjunta definida contra Yemen, el eje sionista-americano contará, según el plan convenido, no solo con fuerzas terroristas extendidas y enfrentadas a las principales resistencias al proyecto-mundo de occidente, sino también con el apoyo explícito de quienes siempre han permanecido detrás de bambalinas en el teatro de operaciones ideado para Oriente Medio por yanquis, israelíes y la Europa de la decadencia.
Hoy esos líderes se muestran abiertamente en el escenario ideado para la región, convidados en el reparto del mundo que se quiere llevar adelante desde el apartheid global, materializando para ello la orden de golpear y derrotar al eje de la resistencia, e impedir la autodeterminación y la estabilidad de cualquier otra nación que les ofrezca batalla, como sucede en estos días con la lucha sostenida por los hermanos shiítas de la milicia de Ansarolá y el sacrificio de todo el pueblo yemení contra los opresores, que ven en la geografía de esta nación el punto estratégico para la continuidad de sus planes en la región y sobre todo para la acumulación de fuerzas en contra de la República Islámica de Irán, clara influencia para los oprimidos.
Para esto la liga árabe y las potencias a las que sirven se valen de falsos eslóganes y difamaciones que lo único que evidencian son los sucios intereses que persiguen.
La dinastía wahhabita, que jamás ha tirado un solo tiro contra los responsables de la ocupación y opresión en Palestina, que jamás condeno siquiera las masacres y el plan de exterminio celebrado por la entidad sionista, hoy cuenta con el beneplácito de líderes de las principales batallas que ha dado palestina y su resistencia, como si se olvidarán que dinastía wahhabita ha estado siempre enfrentada a las naciones y organizaciones que se han solidarizado con la causa Palestina.
Irán-Hezbollah-Siria han visto como los líderes sauditas han financiado y legitimado las creaciones de la CIA y el Mossad para partir la región, fracturar la unidad de naciones y organizaciones de la resistencia, masacrando pueblos con el solo objeto de quedarse con sus riquezas.
Para ello la voluntad manifiesta de estos ataques al pueblo yemení y las acciones terroristas de los grupos takfiries-wahhabitas en toda la región, esbozando el reordenamiento del mapa que pretenden las potencias occidentales de la mano de sus aliados árabes.
Las crecientes muestras de islamofobia alimentadas por usinas de propaganda de las principales potencias, al igual que las recientes declaraciones del mandatario egipcio, son una muestra de hacia donde se enfilan las agresiones al mundo islámico; en su visita a la Universidad Al-Azhar para abordar el papel de la referencia religiosa, Al-Sisi dijo que había llegado la hora de reformar el Islam, ganándose la ovación occidental, Al-Sisi sostuvo en su alocución que la Umma “será dividida violentamente, destruida y enviada al infierno" expresando con vehemencia los deseos y pretensiones de las potencias occidentales.
La crisis civilizatoria que atraviesa a la sociedad moderna tiene resolución en las tradiciones espirituales, el Islam, tan caro culturalmente para occidente, expresa desde su resistencia, particularmente shiíta, la victoria de los oprimidos del mundo sobre los arrogantes y poderosos, sin dudas que en Oriente Medio se dan hoy todas las batallas, lo lamentable es que en ese escenario algunos líderes han optado por los arrogantes, usurpadores y opresores, eligiendo el camino de la humillación.
"Y encontrarán ante ellos lo que hicieron" nos dice el Sagrado Corán, la riqueza de la que se apropian, los corazones de los creyentes que queman, la opresión que extienden contra sus propios hermanos, solo Allah sabe que aquello que hacen será el castigo que se han preparado para sí mismos.
La victoria será de quienes no se extravían, inshallah.
Algunas instantáneas de los actores que expresan posiciones encontradas con respecto a este conflicto, condicionando las perspectivas estratégicas de cada uno de ellos:
El eje sionista-americano muestra todas las caretas con Yemen, se confirma una vez más que los shiítas somos los únicos dispuestos a resistir frente a los opresores.
Desde Palestina, Abbas apoya la invasión a Yemen y además le pide a la Liga de los dementes árabes que ataquen Gaza, mientras HAMAS expresa su apoyo al presidente fugitivo Abdo Rabu Mansur Hadi y reverencia la coalición imperialista wahhabita antiyemení liderada por Arabia Saudí y demás regímenes pro occidente.
En Líbano, Bassil se justifica sosteniendo: "Nosotros creemos que siempre es mejor una posición que una a los árabes, aunque sea una posición equivocada, que tomar una posición que los desuna".
Es el Presidente egipcio, Abdel Fataj Al-Sisi, quien expresa con mayor claridad la voluntad manifiesta de estos ataques al pueblo yemení y las acciones terroristas de los grupos takfiries-wahhabitas, esbozando el reordenamiento del mapa que pretenden en toda la región las potencias occidentales y sus aliados árabes.
En su visita a la Universidad Al-Azhar para abordar el papel de referencia religiosa del país, Al-Sisi dijo que había llegado la hora de reformar el Islam, ganándose con esto la ovación occidental, incluyendo una candidatura al Premio Nobel de la Paz. “Hemos llegado al extremo en que los musulmanes se han puesto en contra al mundo entero" sostuvo en su alocución. "¿Es razonable pensar que 1.600 millones [de musulmanes] desean matar a los 7.000 millones de habitantes del mundo restantes para que prosperen los musulmanes? Esto no es posible”. Sisi, para aplauso enfervorecido de los dignatarios religiosos reunidos con motivo de su intervención, instó a emprender “una revolución religiosa”. En ausencia de ella, la comunidad musulmana “será dividida violentamente, destruida y se irá al infierno” afirmo, poniendo su voz al deseo de las potencias occidentales.
Siete monarquías y una dictadura militar están bombardeando Yemen asesinando civiles y niños por ''Democracia'', en la misma sintonía Al-Qaeda en la Península Arábiga ofrece 20 kgs de oro como recompensa a quien asesine o capture al líder del movimiento revolucionario shiíta huzi Ansarulá, Abdulmalik al-Huzi.
El líder del Hezbollah definió como un "catastrófico fracaso" la operación que lleva a cabo en Yemen la coalición árabe liderada por Arabia Saudí, afirmando que "la ceguera ha llevado a Arabia Saudí a defender a Al Qaeda y al DAESH entregándoles armas pese a que son una amenaza para la seguridad de ese país", sostuvo Nasrallah
Mientras la Liga Hipócrita, ahora dice condenar los crímenes del sionismo, deplorable el papel de la Liga Árabe y Arabia Saudita en particular, quienes además de los crímenes y su asociación con las potencias occidentales, pretenden darle legalidad a un tribunal de caricatura que "juzgue" al Hezbollah.
La resistencia Palestina, y en particular a Hamas, ejemplo contra la opresión, ocupación y agresiones de la entidad sionista, frente a este escenario, incurre nuevamente en un gran error con su apoyo al mandatario yemení que se dio a la fuga, y que hoy pretenden poner nuevamente en el gobierno los países árabes prosionistas por mandato de EEUU e Israel, para asegurar la hegemonía de la dinastía wahhabita.
A no dudar que Abdo Rabu Mansur Hadi en el gobierno les asegura un servil gerente de sus intereses sobre Yemen, y una zona estratégica esencial para sus planes regionales.
Hamas se vuelve a equivocar en su lectura de la crisis integral en Oriente Medio, lo hizo también con Siria dando su apoyo a los sectores rebeldes que financiaron y entrenaron la CIA y el Mossad y que ha legitimado durante 4 años Arabia Saudita.
La correlación de fuerzas en Yemen con la irrupción shiíta será sin dudas en favor de la Resistencia y el Pueblo de Palestina, ya que se va dando día a día una guerra de posiciones, por lo que dejar en manos de Arabia Saudita y sus títeres a Yemen es limitar la posibilidad de avanzar hacia un equilibrio de fuerzas favorable al eje de la resistencia, limitando el poder de daño y la ocupación que desarrollan las potencias occidentales, con el eje sionista-americano en connivencia con los líderes árabes.
La intervención de fuerzas extranjeras en Yemen lideradas por el régimen saudita, y el apoyo que sostienen los líderes de Hamas no se corresponde con la historia y resistencia del pueblo palestino, en su lucha continúa durante casí 70 años ninguna de las monarquías y dictaduras que hoy desangran al pueblo yemení siquiera tiraron un solo tiro contra los ocupantes sionistas.
El eje de la resistencia y su solidaridad manifiesta con los oprimidos:
Resulta imposible pensarse por fuera de las luchas contra la opresión que se desarrollan en cualquier parte del mundo y en particular en Oriente Medio y Asia; el rol de Hezbollah e Irán y sus articulaciones con Siria, y el apoyo de la organización shiíta libanesa y la República Islámica a la resistencia Palestina para sostener el equilibrio de fuerzas en esa región del mundo; las tácticas utilizadas por el eje de la resistencia, y la perspectiva estratégica para los pueblos que las han impulsado, la resistencia a las agresiones externas, las injerencias de las principales potencias, la asociación y traición de una docena de los países árabes, y la moderación de algunos líderes frente a la brutalidad de los enemigos que se entiende a todas las geografías con crueldad manifiesta.
El proyecto mundo occidente de apartheid global promovido por el eje sionista-americano es una realidad más allá de nuestras narices, y las formas de lucha y organización que se impulsan no pueden depender exclusivamente de la voluntad de los estados y gobiernos, de allí que la reivindicación de Hezbollah y su influencia en el escenario regional, donde la espiritualidad está indisolublemente ligada al proyecto político, no esté sujeta a idealizaciones de ningún tipo, sino a los límites objetivos que las potencias arrogantes encuentran en la región para sus planes.
Ha sido el Hezbollah quien desde un primer momento insto a la unidad del pueblo yemení, condenando la intervención extranjera.
Ante las agresiones al movimiento rebelde shiíta de los hutíes en Yemen, realizadas por Arabia Saudí, y a las que se han plegado países árabes y no árabes en connivencia con los intereses norteamericanos, la organización libanesa emitió un comunicado contra la intervención militar, donde sostuvo que "Hezbollah condena de modo enérgico la agresión de Estados Unidos y Arabia Saudí contra el pueblo hermano de Yemen, su ejército nacional y sus instalaciones vitales, así como la interferencia de algunos países árabes y no árabes en dicha agresión".
Para Hezbollah, "esa aventura es insensata y no tiene razón de ser y solo acarreará más tensiones y riesgos para la región".
Las movilizaciones de apoyo a los rebeldes hutíes intentaron ser repelidas por aviones de combate de Arabia Saudí e Israel, la dinastía saudita y varios países sostuvieron durante días una ofensiva aérea que intento coartar el desarrollo de Ansarolá y mantener en el gobierno al presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, dando garantías a los intereses sionistas y a las potencias occidentales en la región.
Frente a esos ataques contra la población yemení el Hezbollah exigió a "Arabia Saudí y a sus aliados que cesen inmediata e incondicionalmente esa agresión injusta que está destinada a garantizar los intereses estadounidenses y que ofrece un gran servicio a los enemigos sionistas, provocando más extremismo y hostilidad hacia el pueblo palestino y otros pueblos de la región".
La resistencia shiíta libanesa ha instado al pueblo yemení a la unión y a encontrar una solución política que "preserve su país y garantice la unidad y la integridad territorial sin interferencia extranjera", en ese camino es que la organización Ansarolá suma adherentes y se extiende en todo Yemen, haciendo retroceder a las fuerzas pro occidentales conducidas por la dinastía wahhabita.
*Integrante del Centro Islámico de la provincia de Jujuy, docente del Instituto Taki Onqoy, Secretario General de la OLA-Organización para la Liberación Argentina
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