miércoles, 27 de mayo de 2015

APROVECHANDO TORMENTA DE ARENA EL ISIS EFECTÚA MÚLTIPLES ATAQUES SUICIDAS EN ANBAR QUE MATAN A AL MENOS 55 SOLDADOS



Extremistas del Estado islámico desataron una ola de ataques suicidas contra el ejército iraquí en la provincia occidental de Anbar, matando al menos a 55 soldados en un duro golpe a los esfuerzos del gobierno para desalojar a los militantes desde el corazón sunita en expansión, un portavoz militar iraquí dijo el miércoles.

Los ataques se produjeron apenas unas horas después de que el gobierno iraquí anunció el martes el inicio de una operación a gran escala para recuperar las zonas bajo el control del grupo es en Anbar.

Brig. Gen Saad Maan Ibrahim, portavoz del Comando Militar Conjunto, dijo a The Associated Press el miércoles que los ataques tuvieron lugar fuera de la ciudad nl control del Estado Islámico de Faluya tarde la noche anterior.

Los militantes atacaron cerca de una estación de control de agua y un sistema de bloqueo en un canal entre el lago Tharthar y el río Eufrates, donde las fuerzas del ejército se han desplegado para la ofensiva de Anbar, dijo.

Ibrahim agregó que los extremistas del Estado Islámico utilizaron una tormenta de arena que afectó a la mayor parte de Irak el martes por la noche para poner en marcha la ola mortal de atentados. Él dijo que no estaba claro cómo se involucraron muchos atacantes suicidas en los atentados, pero que llegaron a los militares desde múltiples direcciones.

El mes pasado, la estación de agua cerca de Faluya cayó en manos de militantes de SI - después de los ataques, que también incluyeron varios atentados suicidas y que mataron a un general al mando de la primera división y una docena de oficiales y soldados.

Las fuerzas gubernamentales iraquíes recuperaron la estación a los pocos días. Faluya se encuentra al este de la capital de la provincia de Anbar de Ramadi, que fue capturada por los militantes de Isis hace casi dos semanas en lo que fue una gran derrota, humillante para las tropas iraquíes a manos de los extremistas.

La operación iraquí para retomar Anbar, que se dice ser respaldado por las milicias chiítas y los combatientes progubernamentales suníes, se considera fundamental para recuperar el impulso en la lucha contra el Estado islámico.

El grupo ha capturado Ramadi en Irak y la antigua ciudad siria de Palmira a principios de este mes, demostrando que es capaz de avanzar en ambos países a pesar de meses de ataques aéreos liderados por Estados Unidos.

Ministro de Relaciones Exteriores de Siria, dijo el miércoles que su gobierno no está poniendo toda esperanza en la sorprendente coalición liderada por Estados Unidos en los militantes del grupo Estado Islámico en su país.

En una conferencia de prensa en Damasco, Walid al-Moallem dijo que la coalición estaba activa en la prevención de la ciudad kurda de Kobani de caer en manos de SI año pasado, pero que este apoyo parece haberse "evaporado" después de eso.

Los Estados Unidos no hizo nada para evitar que la antigua ciudad de Palmira en Siria o la provincia de Anbar en Irak caiga en manos de SI, dijo.

"No estamos fijando las esperanzas en esa alianza y cualquier persona que hace es vivir una ilusión", añadió al-Moallem.

Al-Moallem también dijo que Irak y Siria estaban peleando la misma batalla, pero agregó que la coordinación de seguridad entre sus dos ejércitos "no ha alcanzado los niveles deseados."

También el miércoles, activistas sirios, dijo el grupo Estado Islámico puso en libertad dos ancianas cristianos que se habían celebrado junto con docenas de otros desde febrero en el noreste de Siria.

En ese momento, fueron secuestrados más de 220 cristianos asirios después de pasarse varias comunidades agrícolas en la orilla sur del río Khabur en la provincia de Hassakeh.

Las dos mujeres, que son 70 y 75 años de edad, fueron puestos en libertad el martes y ahora han llegado a la ciudad noroccidental de Hassakeh, dijo Osama Edwards, director de la Red de Asiria para los Derechos Humanos.

Otro grupo de activistas, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, dijo que los dos probablemente fueron puestos en libertad debido a su mal estado de salud. Algunos de los cautivos habían sido liberados con anterioridad.

Edwards dijo que el Estado Islámico aún se mantiene 210 cristianos asirios y reclama 100.000 dólares para cada uno de rehenes.

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