Los grupos terroristas que operan Siria son mercenarios pagados por Israel y representan una amenaza mayor que los ataques aéreos ordenados por Tel Aviv, afirmó el presidente sirio, Bashar al-Assad.
En una entrevista concedida a la televisora libanesa al-Manar, al-Assad insistió que las verdaderas herramientas que Israel utiliza contra Damasco (las bandas extremistas armadas), son más peligrosas que los recientes ataques aéreos ejecutados por la aviación sionista contra la ciudad de Quneitra y en las Alturas del Golán ocupado.
Al-Assad subrayó que el ejército sirio no responderá por el momento a los recientes ataques israelíes, pero si combatirá a los grupos yihadistas armados y financiados por Tel Aviv, a los que calificó como mercenarios.
“Si queremos hacer frente a Israel, primero tendremos que tratar con sus agentes dentro de Siria”, enfatizó el presidente.
Las tensiones se incrementaron después que aviones no tripulados sionistas atacaron territorio sirio el día 21 de agosto, provocando la muerte de cinco civiles, mientras que un helicóptero disparó varios cohetes contra los edificios de la Gobernación y la Dirección de Transporte, causando serios daños materiales en sus estructuras.
Dos días después, un avión de combate israelí no tripulado (dron) fue derribado por la defensa antiaérea sobre la ciudad de Quneitra, a 67 kilómetros al suroeste de esta capital, después de violar el espacio aéreo sirio.
Casi 24 horas más tarde, las unidades de la defensa antiaérea dispararon contra un avión caza de la fuerza área de Israel, que penetró en el territorio de Quneitra, obligándolo a regresar a territorio israelí.
El pasado 18 de agosto, el sitio digital estadounidense South Front, dejó entrever que Israel se prepara para invadir los Altos del Golán sirios (ocupados ilegalmente desde 1967) y otras zonas del sur de este país árabe.
Según South Front, hace unos días el ejército sionista desplegó extensas maniobras militares, que incluyeron una simulada invasión terrestre al territorio sirio, ante supuestos ataques de la milicia libanesa (Hezbola).
El sitio digital norteamericano explica que, según expertos, el ejército israelí lanzaría una operación terrestre para neutralizar los recientes logros de las fuerzas sirias en su lucha contra las bandas terroristas que cuentan con el apoyo del régimen de Tel Aviv.
Según analistas, estos ataques provenientes de Israel, están dirigidos a apoyar a las organizaciones terroristas armadas y tratar de levantar su baja moral combativa.
Más críticas a Israel
El periódico israelí Haaretz ha señalado que “Tel Aviv ha fracasado en explotar el lanzamiento de misiles hace tres días desde Siria hacia los Altos del Golán y Galilea”. La entidad sionista ha sido incapaz de convencer al Congreso de EEUU de la implicación de Irán en estos hechos.
Esto no ha impedido a la prensa israelí hablar de “un nuevo frente en el Golán”.
El periódico Israel Today se pregunta si el enfrentamiento que tiene lugar en la frontera con Siria supone el inicio de una escalada que amenaza con explotar en algunos días o semanas o si se trata de un incidente aislado.
El diario señala, a este respecto, que “Irán y Hezbola no están interesados en una escalada general a lo largo de la frontera norte, pero desean mantener un frente activo en el Golán, acompañado de una débil escalada” y afirma que “las partes no están interesadas en un deterioro de la situación de seguridad en la frontera, teniendo en cuenta además el riesgo evidente de perder el control sobre la misma”.
Por su parte, el periódico The Times of Israel afirmó que la situación en el escenario sirio no puede cambiar a corto plazo y dijo que los informes que hablan de reuniones entre Siria, Arabia Saudí e Irán con vistas a una solución política para poner fin a la guerra siria son “irreales” en este período.
Israel lanzó la pasada semana ataques aéreos contra el Golán sirio ocupado causando la muerte a seis personas. El ejército de ocupación israelí presentó tales ataques como una represalia contra el lanzamiento de varios misiles contra posiciones israelíes en el Golán y Galilea.
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