El portavoz de la Cancillería iraní, Husein Yaber Ansari, opina que las autoridades de Arabia Saudí luchan para regresar al pasado.
“Arabia Saudí es un poder regional que lucha para retroceder las manecillas del tiempo”, dice Yaber Ansari durante una entrevista con el diario persa Irán, publicada este domingo.
En su opinión, la política saudí de resistencia ante los acontecimientos internos y periféricos ya ha fracasado y, por tanto, Riad debe ajustarlas para poder convivir con los cambios.
Arabia Saudí es un poder regional que lucha para retroceder las manecillas del tiempo”, declara el portavoz de la Cancillería iraní, Husein Yaber Ansari
El problema que tienen los Al Saud (familia que rige Arabia Saudí), explica el diplomático persa, es que no puede aceptar las nuevas realidades que están ocurriendo tanto dentro del país árabe como en sus alrededores.
Según el titular iraní, esta ignorancia está costando mucho a los saudíes, pues, les aconseja que dejen su “política de confrontación” y acepten las realidades del mundo para garantizar sus propios intereses.
Además, manifiesta que el contrapunto entre Arabia Saudí y la República Islámica de Irán radica en la política exterior de Riad y su continuación, agrega, ha causado más tensiones y crisis en Oriente Medio.
El vocero del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores hace hincapié en que mientras Riad siga creando tensiones y crisis en la zona, no se podrá encontrar soluciones para ninguno de los problemas de la región.
Para acabar, asegura que Teherán no busca provocar tensión alguna ni con Arabia Saudí ni con ningún otro país islámico, pero en cambio, evoca el funcionario persa, Arabia Saudí tiene como prioridad la iranofobia.
La reciente escalada de tensiones entre Irán y Arabia Saudí comenzó tras la ejecución del clérigo opositor chií el sheij Nimr Baqer al-Nimr en Arabia Saudí. La situación empeoró después de que Riad anunciara la ruptura de todas las relaciones diplomáticas con Irán, pretextando las enérgicas críticas de Teherán por dicha ejecución y el asalto a sus sedes diplomáticas en el país persa.
Mientras tanto, muchos países acusan al régimen de Arabia Saudí de brindar todo tipo de apoyo a los grupos terroristas presentes en la región y de agravar las crisis, como la de Siria. Además, desde hace casi un año, Yemen es blanco de los bombardeos saudíes, convirtiendo a Riad en el responsable directo de laspérdidas humanas.
“Arabia Saudí es un poder regional que lucha para retroceder las manecillas del tiempo”
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