Después de años de la tartamudez y engaños, la administración Obama finalmente habló claramente acerca de sus objetivos en Siria: la lucha para derrocar a Bashar al-Assad, el gobierno de Obama está aliado con al-Qaeda. Esto es lo que ya era evidente desde Jisr Ash-Shughur, una pequeña ciudad en el noreste del país, cayó el 25/4, invadido por una coalición respaldada por Arabia Saudita y Turquía, que consiste en Frente Al-Nusra, el grupo Ahrar al Sham y varios otros grupos más pequeños, y "moderado".
El Frente Al-Nusra, apoyado por Arabia Saudita, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos, es el afiliado oficial siria de Al-Qaeda (Financial Times, sólo para usuarios registrados). El grupo Ahrar al-Sham, fuertemente apoyada por Qatar, también está asociada con Al-Qaeda y también cooperó con ISIS. Los otros grupos que comparten estas denominaciones, como la División Costera [orig. División Costera] y las Brigadas Al-Ghab, forman parte de la denominada "Ejército Sirio Libre" creada y mantenida por los EE.UU., y son tan supuestamente antiterrorista como son declaradamente anti-Assad. Y todo esto 'enganchado un paseo' en el ataque, para usar la terminología técnica de The Wall Street Journal (sólo para suscriptores), haciendo todo lo posible para facilitar el avance liderado por el Frente Al-Nusra.
Implica que los EE.UU. mantuvimos grupos ayudaron a Al-Qaeda para tomar una ciudad secular. Pero eso no es todo lo que los EE.UU. hicimos. Gran número de misiles TOW También se proporciona célula óptica ©, los rebeldes utilizan para destruir decenas de tanques del ejército sirio regulares y otros vehículos, como se ve en los vídeos distribuidos a través de redes sociales. Un pro-estadounidense Fares terroristas nombre Bayoush dijo a The Wall Street Journal (sólo para suscriptores) que remolca "alterado el equilibrio de poder", dando a los terroristas salafistas la ventaja que necesitaban para desalojar al ejército del Estado sirio, muy apretado instalado en la ciudad.
Con Siria ha acusado a los militares turcos de ser proporcionar "apoyo logístico y fuego" a los terroristas todos sugieren que los terroristas han transportado los misiles a través de la frontera con Turquía, a menos de 15 kilómetros al oeste de Jisr Ash-Shughur. No se sabe si los misiles TOWS fueron utilizados por Al-Nusra Frente u otra de las facciones terroristas pro-estadounidenses. Pero no hay duda en cuanto a la procedencia de los misiles.
A finales de 2013, Arabia Saudita fue entusiastamente compras y compró más de 15.000 misiles antitanque Raytheon, el precio total de más de $ 1 mil millones. La compra despertó sospechas ya que los misiles TOWS se utilizan principalmente contra los tanques y otros blindados amenaza los sauditas nunca tuvieron que enfrentar desde la caída de Saddam Hussein.
Ahora, todo se aclara. Las armas contra presunto progreso chií en Irak, Siria, Líbano y Yemen, los arquissunitas Riad compraron los misiles con la intención de pasar a los sirios salafistas, con la esperanza de revertir la marea chií.
Regulaciones estadounidenses prohíben las transferencias de armas a terceros, pero hasta ahora Washington no dieron un puntazo. Política de Estados Unidos ha sido la de armar rebeldes moderados, siempre bajo la condición de que no tenía nada que ver con Al Qaeda. También en este sentido, los estadounidenses se quedaron en silencio.
Un alto funcionario del gobierno admitió que el Washington Post que la Casa Blanca está "preocupado por el Al-Nusra han tomado el relevo." Sin embargo, dijo que sabe que el gobierno sabe que "debido a las realidades sobre el campo de batalla, donde la oposición Más moderado se ve obligado a convivir "con grupos terroristas, se llevará a cabo algún tipo de cooperación. También dijo que el gobierno "no es ciego al hecho de que es en cierta medida inevitable" que las armas estadounidenses terminan incluso en manos de terroristas. Pero todo lo que podía decir en respuesta es que "sin duda no deja de discutir el tema con nuestros socios."
El gobierno de Obama, es decir, conocer a sus clientes-vasallos están aliados con Al-Qaeda; y sabe que las armas estadounidenses están llegando a los terroristas. Y todo lo que puedo decir es que [nunca] puede llegar a plantear la cuestión con los terroristas 'socios. Por ahora, el gobierno de Obama está plenamente incorporada a la ofensiva liderada por los terroristas de Al-Nusra frontal.
Es como el 11/9 nunca sucedió. Pero en vez de protestar contra lo que es, de hecho, un ataque conjunto entre Estados Unidos y Al-Qaeda, el Departamento de Estado sólo hace o mantener discreto silencio o en voz alta alabanza avanza a los terroristas de Al-Nusra Frente como " la mejor cosa que podría suceder en una crisis en el Medio Oriente ", en palabras de Walter Russell Mead en The American Interest.
Lina Khatib, director del Centro Carnegie para Oriente Medio en Beirut, fue igualmente entusiasta: "pragmatismo Nusra y acontecimientos actuales muestran que [el frente] puede llegar a ser un aliado en la lucha contra el Estado islámico" - escribió. "Si bien no todos disfrutan de la ideología Nusra, existe una creciente creencia en el norte de Siria que es la mejor alternativa en el campo - y que la ideología es pequeño precio a pagar por el retorno sustancial".
"La creciente convicción" ... ¿dónde?! Entre alauitas y cristianos que con razón venir a través de Al-Qaeda como una amenaza de genocidio? Hay alrededor de una docena de años, si alguien sugirió una alianza con los EE.UU. Al-Qaeda, cualesquiera que sean los términos, candidatava a ser linchados. Ahora los expertos sobre la política exterior estadounidense, hecho Mead y Khatib, no dude en militan a favor de esta alianza, sin miedo a ser contradicho.
¿Por qué? Debido a que las relaciones entre los EE.UU. y Al Qaeda han sido durante mucho tiempo mucho más ambigua que la política exterior de Estados Unidos (las dos partes y todas compañía de medios de Estados Unidos) quieren (m) que los estadounidenses comunes Conocer y comprender . No sólo los EE.UU. unimos a los saudíes como los modernos parteras movimientos yihadistas durante la guerra contra la Unión Soviética en Afganistán, así, después del 9/11, el gobierno de Bush trabajó diligentemente para encubrir los muy estrechos vínculos que existían entre Osama bin aliados saudíes Laden y anteriores de los EE.UU..
Ciudadanos saudíes, incluidos miembros de la familia Bin Laden, fueron ayudados a salir de los EE.UU. en los días siguientes al ataque a las torres gemelas, casi permitido el FBI. Una sección de importancia crucial de 28 páginas del informe conjunto del Congreso sobre 11/9, desaparecido; y un investigador de la comisión fue despedido por tratar de examinar la cuestión de la financiación saudí [en este ver Philip Shenon, la Comisión: La historia sin censura del 9/11 Investigaciones (Nueva York: Doce, 2008), pp. 109-11.]
Bush y Cheney "se negó a levantar la confidencialidad de cualquier cosa que tuviera algo que ver con Arabia Saudita", lamentó tras el ex secretario de la Armada John F. Lehman, miembro de la comisión de investigación. "Todo lo que tenía que ver con los saudíes, por alguna razón, fue tratada como información máximamente sensibles." [Ibid., 185-86.]
El gobierno de Bush sólo trataba de "descubrir" los lazos entre bin Laden y Saddam Hussein - que, por supuesto, nunca existió - y al mismo tiempo, trabajó frenéticamente para reprimir una gran cantidad de elementos que acrediten los vínculos entre Al-Qaeda y la Casa de Saud.
Como prometió "pasar fuego" en bin Laden, el interés real de Bush era derrocar a Saddam. Al final, la política estadounidense para al-Qaeda resultó ser muy poco diferente de la política de Riad: la hostilidad cuando los terroristas se atrevieron a bombardear la madre patria, pero la tolerancia e incluso la aprobación y aliento cuando las actividades de los terroristas acompañó al objetivos de la política exterior de Estados Unidos.
Mientras que el ISIS, hiper brutal despliegue de Al-Qaeda, se limitó a demonizar al régimen de Damasco, los Estados Unidos se mantuvo firme con la cabeza en la dirección opuesta para ver nada de las atrocidades. Sólo cuando el Estado Islámico salió del nicho original y atacó a la gente de Washington en Bagdad, y luego, después de todo, los EE.UU. resultó ser muy ofendido.
Pero donde los funcionarios del gobierno de Estados Unidos han sentido obligados a mantener oculto antes de las relaciones con al-Qaeda, el ritmo acelerado de los acontecimientos en el Medio Oriente comienza a permitir que se hablan más abiertamente. Con la caída de los precios del petróleo, y una línea muy dura rey venir al trono en Riad, un primer ministro igualmente obsesionados y la línea-pedernal fue reelegido en Israel. En el momento en los EE.UU. dependemos de la firma sin precedentes, acuerdo nuclear sin precedentes para mejorar sus relaciones con Irán.
Efecto de todo esto fue que las reglas fueron reformuladas, aunque no exactamente como el pueblo estadounidense espera. Cuando el acuerdo inminente con Irán llevó rápidamente a la especulación de que él estaría en curso "el reajuste más fundamental de la política exterior en una generación", la realidad era lo contrario de que, como los republicanos y los demócratas se apresuraron a garantizar a sus socios estratégicos, repitiendo que el antiguo pacto era todavía virgen.
Por lo tanto, el control de hierro que Netanyahu tenía en el Congreso de Estados Unidos sólo aumentó, mientras que Arabia Saudita y otros estados árabes del Golfo se les dio carta blanca para hacer lo que quisieran en contra de la "creciente" chiíta Sanaa a Beirut que supuestamente amenazar.
Poco más de un mes después de su ascensión al trono, el rey Salman se reunió con el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan y le golpeó sería aumentar el apoyo a los insurgentes sunitas sirios, incluidos los grupos que tenían lazos con Al Qaeda, que había sido previamente 'prohibido'. En lugar de continuar con boicotear esos grupos, como los EE.UU. queríamos, el nuevo enfoque llegó a ser el apoyo al Frente Al-Nusra y otras fuerzas similares, argumentando que ellos serían los únicos capaces de hacer el truco.
El resultado se hizo de nuevo un par de semanas más tarde, cuando Al-Nusra y Ahrar al Sham anunciaron la formación de un nuevo nombre de la coalición "Ejército de la Conquista" [ing. Ejército de la Conquista (Jaysh al Fateh)], que también incluiría varios pequeños grupos islamistas. A finales de marzo, la nueva coalición tomó Idlib, a unos 50 kilómetros al noreste de Jisr Ash-Shughur. A finales de abril, armado con misiles TOWS fabricados en los EE.UU., se llevaron Jisr Ash-Shughur.
Deseoso de proteger a sus relaciones con los saudíes, antes del acuerdo inminente con Irán, el gobierno de Obama no se atrevió a objetar. La misma lógica se impuso cuando Arabia Saudí lanzó ataques aéreos contra Yemen día 25/3 en el tiempo cuando las negociaciones con Irán fueron a toda velocidad. Si Riad consideró que no había otra opción que no era el que destruya el Yemen, el más pobre de Oriente Medio, con incursiones nocturnas y escuelas de bombardeo y hospitales ... los EE.UU. ni tampoco ninguna objeción.
Como un funcionario del Departamento de Estado, "es importante que los saudíes saben que tenemos un brazo que involucra sus hombros." Más de mil yemeníes han muerto como resultado de este "gesto", a unos 300.000 yemeníes tuvieron que abandonar sus hogares y huir, mientras que Al-Qaeda en la Península Arábiga se aprovechó del caos reinante para asumir el control del puerto de Al Mukalla, en el este el país y gran parte de la provincia Hadramaut alrededor del puerto.
Pero en el caso de que en otros tiempos, los EE.UU. utilizó aviones no tripulados contra al-Qaeda, sin preocuparse por los daños colaterales entre la población civil local, esta vez Washington parece descaradamente indiferente.Si los saudíes no se molestan con este avance de Al-Qaeda, ¿por qué los EE.UU. le importaría?!
En el momento en que estas políticas están empujando a Siria y Yemen hacia el colapso, y la generación de ola de refugiados, el único consuelo es que los saudíes pueden también desmoronando bajo presión excesiva. Con su terreno montañoso y las divisiones tribales profundos, Yemen ha sido durante mucho tiempo el caso de estudio de caos controlado. Pero Riad parece haber hecho todo lo posible para empeorar una situación ya difícil.
Como se ha señalado por los diplomáticos estadounidenses, los insurgentes Houthi, que ahora parece dividir el país en dos, no comenzó a solas. En lugar de ello, comenzó una ola de wahabí anuncio pagado por los saudíes, que negó los peores temores de la minoría chií yemení, y empujó o huzíes para seguir la guerra. Como hemos leído en el telegrama secreto del Departamento de Estado en 2009, promovido por Arabia salafismo "se extendió rápidamente en Yemen en las últimas dos décadas", lo que llevó a los huthis sentir "cada vez más amenazado".
En la provincia de Saada, en el norte de Yemen, donde antes se decía que la provincia era "como Shia que hasta las piedras son chiíes", los residentes comenzaron a sentirse asediado, rodeado de aumento del número de escuelas y mezquitas sunitas- salafistas construidas con dinero de los jeques saudíes petro-ricos.
La creciente sectarismo Arabia respiró el sectarismo Houthi y empujó al país a una guerra civil. Para los diplomáticos estadounidenses criticaron a los saudíes para tratar de imponer una solución militar contra los huthis, en lugar de buscar una solución política.
Como embajador Stephen Seche escribió Estados Unidos en noviembre de 2009, Riad estaba transfiriendo la mayor cantidad de ayuda militar al presidente Ali Abdullah Saleh de Yemen - ahora, irónicamente, un aliado de huzíes - que "es inevitable que las armas terminen en Yemen, en ese mercado en auge brazos negros "(...). A partir de ahí, nadie sabe dónde están las armas vuelven a aparecer, y puede reaparecer incluso en manos de grupos extremistas dedicados a atacar intereses occidentales en Yemen -. Pero también, irónicamente, Arabia Saudita y vecinos países del Golfo "
"Es imperativo que el Departamento [de Estado]" - Seche continuó - "transmite esos 'Amigos de Yemen' que están trabajando en contra del objetivo de la publicidad - para obtener una estable y seguro Yemen, con la gran cantidad de dinero y ayudar militar que dio el país. "excelente consejo que por desgracia cayó en oídos sordos. En lugar de menos, los saudíes optaron por más militarización - con consecuencias desastrosas tan claramente predecible y predijo.
Sin embargo, hay indicios de que los saudíes pueden haber mordido más de lo que puede masticar. Riad, por ejemplo, en un principio anunció que Pakistán estaría entre los diez estados de mayoría sunita que participan en la operación anti-huzíes. Pero cuando Riad explicó que los soldados chiítas no serían bienvenidos, Islamabad puso de nuevo de pie.
Con chiíes representan el 20% de la población de Pakistán, la discriminación impuesta por los saudíes se habría elevado las tensiones religiosas, y poner al país en una guerra civil similar a Líbano cumplido.
Mientras lo hacían poco contra el avance de los huthis, las incursiones y bombardeos nocturnos poner a la vista la incapacidad del reino a luchar en tierra. Fuerte en el aire, los saudíes son tigres de papel sólo que deciden la guerra: en el suelo.
Es cierto que la purga reciente promovida por el rey Salman, la más amplia de las últimas décadas, puede ser señal de que el descontento crece en las filas reales, ya que se sabe que el príncipe Muqrin bin Abdul Aziz, la víctima más importante de la purga, es conocido por criticar la guerra contra el Yemen. Cuanto más la intervención militar se va por un camino sin salida, más la disidencia intensifica - y si hay una cosa que la autocracia absoluta saudí no puede tolerar, es la disidencia política.
Por último, está la reciente detención de 93 presuntos miembros de ISIS, acusado de planear ataques contra la embajada de Estados Unidos y otros objetivos. Si las acusaciones resultan ser ciertas si - que siempre es un gran "si" en el que tiene que ver con Arabia Saudita - será otra indicación de que, a pesar de gastar miles de millones para construir una barrera electrónica de alta tecnología a lo largo de la contención su frontera norte, el reino saudí sigue siendo vulnerable, incapaz de mantener lejos el ISIS.
No importa lo bueno confabulem con Al-Qaeda, siguen teniendo problemas con el mal. Con Abu Bakr al-Baghdadi prometedor para exterminar el 15% de los chiíes, que es en Arabia Saudita, una vez llegado al poder, la señal está claro cómo el extremismo religioso profundiza rápidamente en una atmósfera del sectarismo más inflamable, que la Casa Saud hizo tanto para promover.
El resultado es una colisión por los cuatro lados es en preparación para año. Luchando por mantener unida a su imperio destartalado en el Medio Oriente, Obama no puede decir no a la gigante saudí. Y porque no pueden decir que no a los saudíes, que o bien se puede decir que no a los socios de los saudíes, como al-Qaeda. Los EE.UU. está de nuevo en la cama con los mismos terroristas que tienen dos presidentes para cuatro períodos presidenciales juraron control y fuera. ****
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