Uno de los ejemplos más claros de la seriedad de Rusia en lo que respecta a su operación militar en Siria es el envío a ese país de su más avanzado avión de bombardeo táctico, el Sujoi-34, que ha tomado parte en numerosas operaciones de bombardeo de precisión contra las posiciones e infraestructuras de los grupos terroristas.
Se trata, pues, de un avión de ataque avanzado de la generación 4,5, biplaza, pesado y de largo alcance, de diseño bimotor. Está considerado como el sucesor del Su-24, otro cazabombardero que realiza operaciones de ataque al suelo. Él está equipado con la más moderna tecnología en la cabina de mando y con blindaje en la cabina y los motores
El armamento fijo comprende un cañón de 30 mm con proyectiles de tipo incendiario, explosivos de fragmentación y perforantes-trazadores.
Transporta bombas de caída libre, bombas guiadas por GPS y láser, cohetes y misiles crucero, para atacar posiciones enemigas bien defendidas.
A diferencia del Su-24, el Su-34 posee también una elevada capacidad para protegerse de aviones atacantes y actuar como un caza de superioridad aérea.
Según la revista estadounidense The National Interest, el Sujoi-34 ha causado una gran devastación entre los grupos terroristas en Siria.
La revista señala que la participación en la guerra de Siria ha dado al avión la posibilidad de ser probado en condiciones de combate real contra un enemigo en el extranjero.
También señala que, por sus características, el Su-34 podría convertirse en el enemigo más temible para el EI y otros grupos terroristas en Siria.
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