Los restos mortales de Abdullah Erol, diputado del HDP asesinado en los atentados de Ankara, llegaron a Amed, su ciudad natal, tras la masacre sucedida en la capital del estado Turco.
Erol era una persona muy conocida en la ciudad, por su larga trayectoria de militancia en organizaciones políticas pro-kurdas, como el DBP y el HDP. Fotografias con su rostro y el ataud con su cuerpo (cubierto con la bandera tricolor del kurdistán) encabezaban la marcha fúnebre hasta el lugar de su sepultura, conmemorando los muertos en el atentado de Ankara, así como las victimas mortales que recientemente causó la policia en el barrio de Sûr, en el casco histórico de la ciudad.
El cortejo fúnebre agrupó cientos de personas con gritos de protesta contra el gobierno turco, que reclamaban justicia por las muertes de Ankara culpando directamente a Tayip Erdogán y a su partido, el AKP. Tras llegar al cementerio donde se brindó sepultura a Abdullah Erol, se leyeron unas proclamas y se corearon lemas en apoyo a la lucha del pueblo kurdo. El hostigamiento del estado turco no cesó ni siquiera en estos momentos de tragédia, y cazas militares con la bandera turca sobrevolaron constantemente la ceremonia fúnebre, cruzando el cielo con un vuelo muy bajo, enmudeciendo así las protestas con sus fuertes rugidos de motores. Fuentes locales nos contaron que recientemente, en una ciudad cercana, llegaron a bombardear un cementerio.
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