Miembros de la familia real saudí huyen del país después de que en una contraofensiva los yemeníes lanzaran un misil Scud contra una base aérea en Arabia Saudí, señala un informe.
De acuerdo con la publicación del domingo del portal informativo saudí Ahrar al-Hejaz, entre los principales destinos de los príncipes saudíes se encuentran los países occidentales, sobre todo Francia y el Reino Unido.
Esto tiene lugar después de las consecutivas derrotas del Ejército saudí en el sur del país, donde las fuerzas tribales y las tropas yemeníes han logrado tomar el control de distintos centros militares en respuesta a las incesantes ofensivas del régimen de Riad.
Algunos de los príncipes, agrega el portal, están escapando por el temor de quesean castigados por el rey Salman bin Abdulaziz Al Saud debido a su oposición a la guerra que lidera desde el pasado 26 de marzo su hijo y ministro de Defensa, Mohamad bin Salman, contra el país vecino.
Mientras tanto, un informe del diario árabe con sede en Londres (capital británica) Rai al-Youm, asegura que las fuerzas yemeníes con el disparo del misil Scud han demostrado que tienen a su alcance Riad, capital saudí, a unos 1000 kilómetros de la frontera con Yemen.
Los expertos militares creen que los misiles Scud utilizados por las fuerzas yemeníes son similares a los utilizados por el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) y el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) contra el régimen de Israel.
Scud es un misil balístico de corto alcance que dispone de distintos modelos con un alcance mayor a 1100 kilómetros.
El sábado, los combatientes del movimiento popular yemení Ansarolá lanzaron un misil Scud contra una base aérea en la ciudad saudí de Jamis Mushait (sur) haciendo saltar las sirenas.
Un día después, el portavoz militar saudí, Ahmad al-Asiri, advirtió de que los combatientes de Ansarolá y las fuerzas partidarias del expresidente yemení Ali Abdolá Saleh poseen unos 300 misiles balísticos Scud.
Ansarolá ha puesto de relieve en reiteradas ocasiones que Yemen dará una respuesta dura a los ataques de Arabia Saudí y sus aliados, afirmando que hasta el momento este movimiento ha enfocado su estrategia militar en la defensa para “mostrar la cara fea” de los agresores.
Informes de las Naciones Unidas señalan que un 80 por ciento de la población yemení se encuentra en crisis y la agresión militar a Yemen ha provocado la muerte de al menos 1000 civiles. Algunas organizaciones pro derechos humanos aseguran que la cifra de las víctimas mortales de estos ataques llegan a unos 4000.
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