El Observatorio de Derechos Humanos (HRW, en inglés) califica el primer año de reinado del rey saudí, Salman bin Abdulaziz Al Saud, del más negro en cuanto a derechos humanos.
En un comunicado emitido recientemente, la organización denuncia las continuas medidas represivas del régimen de Riad contra sus detractores.
“El régimen de Al Saud sigue atacando de manera incesable a todo aquel que se oponga a él adoptando medidas que incluyen la detención de críticos con el gobierno, llevando a cabo juicios demasiado injustos ante la Corte Penal Especial y asignando falsos cargos de terrorismo a ellos”, denuncia HRW en su comunicado.
“El régimen de Al Saud sigue atacando de manera incesable a todo aquel que se oponga a él adoptando medidas que incluyen la detención de críticos con el gobierno, llevando a cabo juicios demasiado injustos ante la Corte Penal Especial y asignando falsos cargos de terrorismo a ellos”, denuncia HRW en su comunicado.
Asimismo, volvió a arremeter contra la monarquía saudí por su elevada cifra de ejecuciones y, como ejemplo, nombra la del prominente clérigo chií Nimr Beqer al-Nimr, acusado de terrorismo a principios de enero.
En la nota, la organización también critica al régimen de Riad por seguir practicando medidas discriminatorias hacia la minoría chií en el país árabe, así como la violación de las leyes de guerra en su agresión militar a Yemen.
El número de ejecutados en Arabia Saudí en 2015 llegó a más de 153 personas,la más alta desde hace dos décadas, según Amnistía Internacional (AI): el pasado 2 de enero el reino árabe ejecutó a 47 personas, incluido Al-Nimr.
HRW calificó las ejecuciones de “otra mancha” en el historial de los derechos humanos en Arabia Saudí.
La noticia de la ejecución de Al-Nimr y de otras 46 personas ha desencadenado duras críticas a nivel internacional, también ha provocado decenas de manifestaciones tanto en el territorio saudí como alrededor del mundo.
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