La Cancillería de Siria urge a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) la adopción de medidas serias y disuasorias para acabar con los apoyos extranjeros al terrorismo.
“Los países patrocinadores de grupos terroristas, como el grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe), han de asumir sus responsabilidades ante sus crímenes sangrientos en diferentes partes de Siria y la matanza de civiles sirios inocentes”, reza la carta de la Cancillería siria enviada, por separado, este viernes a la ONU y al CSNU.
Los países patrocinadores de grupos terroristas, como el grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe), han de asumir sus responsabilidades ante sus crímenes sangrientos en diferentes partes de Siria y la matanza de civiles sirios inocentes”, reza la carta de la Cancillería de Siria enviada a la ONU y al CSNU.
La carta del Ministerio sirio confirma que los ataques perpetrados por las organizaciones terroristas contra zonas residenciales seguras en diferentes ciudades sirias son otro capítulo de sus crímenes.
De hecho, afirma, esos crímenes van en cumplimiento de las órdenes emitidas por sus amos en Arabia Saudí, Catar y Turquía y con el fin de frustrar los intentos de los diálogos intersirios y elevar la moral de los terroristas ante el avance de los "héroes" del Ejército de Siria.
A este respecto, el Gobierno sirio ha exigido al Consejo de Seguridad de la ONU adoptar medidas disuasorias contra las organizaciones terroristas y sus patrocinadores, en conformidad con las resoluciones adoptadas (cuyos números son 2170/2014, 2178/2014, 2199/2015 y 2253/2015).
Como ejemplos de los crímenes contra el pueblo sirio, la nota hace referencia a los ataques terroristas con cohetes y proyectiles de mortero del pasado 3 de febrero contra barrios residenciales en la ciudad sureña de Daraa; los cuales dejaron 17 civiles muertos y otros 101 heridos, entre ellos niños, mujeres y ancianos, además de provocar fuertes daños materiales en propiedades privadas y públicas.
Otros ataques similares tuvieron lugar en la ciudad noroccidental de Alepo, donde 10 ciudadanos resultaron heridos, prosigue la nota, para luego agregar que ataques con misiles de elementos terroristas contra un suburbio de Harasta en las afueras de la capitalina ciudad de Damasco, dejaron también un muerto y dos heridos con graves lesiones.
Asimismo, continúa la carta, en la provincia central de Hama un niño sufrió heridas tras la caída de un proyectil de mortero en la localidad de Al-Seen.
Desde el comienzo del conflicto en marzo de 2011, la crisis siria se ha cobrado ya la vida de al menos 260.000 personas, en su mayoría civiles, según el último balance ofrecido por el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) con sede en Londres.
El Gobierno de Damasco insiste en que aparte del liderazgo occidental que tiene la crisis siria, Turquía, Arabia Saudí y Catar son aliados regionales que azuzan el conflicto en el país árabe.
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