El Movimiento de la Resistencia Islámica de Irak (Hezbolá al-Noyaba), ha advertido este domingo que responderá de forma dolorosa a Arabia Saudí por sus políticas injerencistas en Irak.
"El régimen saudí es el responsable del derramamiento de la sangre del pueblo iraquí, razón por la cual en un futuro cercano los combatientes de Hezbolá al-Noyaba le darán una respuesta dolorosa y sin precedente", ha alertado Seyed Hashem Musavi, el portavoz de la resistencia iraquí.
Al referirse a los últimos atentados terroristas acaecidos en el país, ha pedido a las fuerzas de seguridad iraquíes realizar operaciones a gran escala en la ciudad de Bagdad, la capital, para erradicar el terrorismo.
El régimen saudí es el responsable del derramamiento de la sangre del pueblo iraquí, razón por la cual en un futuro cercano los combatientes de Hezbolá al-Noyaba le darán una respuesta dolorosa y sin precedente", ha alertado Seyed Hashem Musavi, el portavoz de la resistencia iraquí.
Asimismo, ha afirmado que este tipo de ataques terroristas no pueden debilitar la voluntad de las fuerzas populares iraquíes en su lucha contra los grupos takfiríes como EIIL (Daesh, en árabe), que han ocupado amplias zonas en el norte del país.
En la misma jornada del domingo, el estallido de varias bombas en una refinería al norte de Bagdad ha dejado al menos 11 muertos y unos 21 heridos.
La implicación de Arabia Saudí en la crisis de Irak no es nada nuevo. El Ejército iraquí halló una fábrica de coches bomba y explosivos de Daesh en la provincia sureña de Basora, donde además, confiscó varias placas saudíes y una serie de libros y folletos publicados en la monarquía árabe.
Irak desde junio de 2014 afronta una cruenta guerra contra Daesh, que conquistó varias zonas en el norte y el oeste de este territorio, donde sigue cometiendo diversos crímenes de lesa humanidad, entre ellos ejecuciones sumarias y secuestros masivos.
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