Turquía tiene todo el derecho a intervenir si las fuerzas kurdas no se retiran al este del río Éufrates, alejándose de la frontera turca, asegura Ankara.
"Por el momento no se han retirado. Seguimos con atención el proceso (…) Esta retirada es importante para nosotros", ha declarado este jueves a la televisiónNVT el ministro turco de Defensa, Fikri Isik, en el segundo día de una ofensiva de grupos armados respaldados por el Ejército turco para tomar el control de la ciudad siria de Yarabulus, cercana a la frontera con Turquía y ocupada hasta ahora por los takfiríes de EIIL (Daesh, en árabe).
Ante ello, el Gobierno sirio tachó el miércoles de “violación flagrante de su soberanía” la incursión militar turca, recordando que la lucha antiterrorista en territorio sirio debe efectuarse, la haga quien la haga, en coordinación con Damasco y con el Ejército sirio, que libra batallas contra el terrorismo desde más de cinco años.
Por el momento no se han retirado. Seguimos con atención el proceso (...) esta retirada es importante para nosotros", ha declarado el ministro turco de Defensa, Fikri Isik.
Por su parte, el Partido Democrático de los Pueblos (HDP, por sus siglas en turco), formación prokurda de Turquía, ha denunciado hoy jueves al Gobierno de Ankara por haber lanzado esa operación terrestre en el país vecino señalando que "las recientes acciones son un claro ejemplo del colapso de la política que Turquía ha estado siguiendo a lo largo de cinco años con respecto a Siria".
En el documento del HDP se considera que aunque el Gobierno del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, haya dado un viraje radical para cambiar la correlación de fuerzas, su nueva política es igual de equivocada que la anterior.
En este sentido, el partido cuestiona la fiabilidad de la actuación turca advirtiendo de que Turquía, tras ocupar Yarabulus, podrá quedarse en Siria por mucho tiempo "de iure y de facto". La formación siria prokurda Partido de la Unión Democrática (PYD, por sus siglas en kurdo) también ha manifestado preocupación por esa hipotética ocupación turca.
El temor de las autoridades turcas a los kurdos de Siria se debe a su avance en el norte del país, que podría permitirles conectar la ciudad de Afrin, en la provincia de Alepo (noroeste), a la de Kobani (norte), con lo que ―a juicio de Ankara― formarían un Estado kurdo unido apoyado por el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
No hay comentarios:
Publicar un comentario